Toro Rosso intensifica el trabajo en la fábrica para llegar a tiempo al primer GP

El parón invernal es de todo menos tranquilo para los equipos de Fórmula 1, que deben ultimar los detalles de un monoplaza que lleva gestándose varios meses. Desde hace unos años es habitual solapar los proyectos en curso con los del siguiente año y, en una temporada tan importante como la de 2017, este proceso se intensifica más si cabe.

Franz Tost, en declaraciones a Autosport, reconoce que los equipos modestos como Toro Rosso deben establecer una fecha límite y detener el desarrollo de la primera versión del monoplaza en curso para poder llegar a la primera carrera. "Esa es la diferencia con un equipo grande, una vez que establecemos el plazo tenemos que decir 'paramos ahora', porque de lo contrario no podemos conducir el coche. Tenemos que conocer la decisión del lanzamiento del boceto en una fecha concreta y saber que no se retrasará, porque estamos en el tiempo límite", afirmó el Jefe del equipo italiano.

Toro Rosso, no obstante, intentará apurar el tiempo todo lo posible y, para ello, implementará tres turnos en la fábrica sin días de descanso. "En cuanto a la producción, vamos a tener que trabajar 24/7 durante un tiempo. Desde mediados de febrero realizaremos tres turnos por día, es un periodo muy corto porque es bastante costoso tener todo funcionando 24 horas". La causa es que, cuanto más tiempo se le da a los diseñadores, más rápido es el coche porque más horas se pueden emplear en el túnel de viento. "Mientras estás en el túnel de viento e investigando, hay opciones de conseguir más rendimiento. Se vuelve complicado cuando el departamento aerodinámico no libera aún los diseños y pide un día más, todo se aprieta, pero eso supone ganar rendimiento. Cada año es lo mismo, nunca cambia”.

Toro Rosso aspira a conseguir, con ayuda del nuevo motor Renault, una plaza entre los cinco mejores equipos a final de temporada.

Fuente: AutosportFotos: Red Bull Content Pool