Análisis F1Una amenaza escondida para Alonso y McLaren-Honda

Retrotraigámonos al año 2013. El equipo Lotus (antiguo Renault) realiza una grandísima temporada, luchando por el subcampeonato de constructores hasta el final, sumando trece podios y una victoria a cargo de Kimi Raikkönen en el Gran Premio inaugural. Nada hacía indicar el 24 de noviembre de 2013, día en que se disputaba la última carrera del año en Brasil, que no fueran a ser de la partida de favoritos la pasada temporada. La pérdida de Raikkönen se solventaba con la llegada de Pastor Maldonado, si no una superestrella, al menos un ganador de carreras como había demostrado en Williams. El venezolano llegaba con unos 30 millones de dólares de PDVSA bajo el brazo en forma de patrocino, por lo que el equipo podría olvidarse en parte de los problemas presupuestarios que le habían acechado aquel 2013 y que fueron en parte causantes de la marcha de Kimi a Ferrari.

Sombras

No todo eran buenas noticias en Enstone, ya que James Allison, a la sazón Director Técnico del equipo, dejaba Lotus en mayo de 2013 para incorporarse a Ferrari, por lo que Lotus perdía una de las figuras claves en el renacer de la escuadra en los últimos años. Además, hace ahora un año, se anunciaba que Éric Bouiller, el Team Principal, se incorporaba a McLaren para asumir el mismo rol. Faltaban días para los primeros test en Jerez, en lo que fue un duro golpe para el equipo. Hasta tal punto sentó mal este movimiento de última hora de Ron Dennis –con toda lógica, por otro lado–, que Lotus ‘contraprogramó’ la presentación de McLaren, haciendo públicas ese mismo día las primeras imágenes del E22. Muchos lo tomamos incluso a broma, y pensamos que el morro con dos extremos era obra del archifamoso community manager del Team Lotus, que buscaba la máxima notoriedad con un diseño tan estrambótico, de forma que quitaba notoriedad a la presentación de los de Woking. Lamentablemente para el equipo, no fue así, y el diseño fue, como dictaba la lógica, un desastre de proporciones bíblicas (valga la exageración). Cabe recordar aquí esa norma no escrita en las carreras que dice que todo coche rápido es además bonito y que, salvo escasísimas excepciones, se cumple a rajatabla. El Williams FW26 “morro de morsa” es otro notable ejemplo, o el Caterham CT05 del pasado año.

Si a estos condicionantes le sumamos el retraso del motor Renault con respecto a la unidad propulsora de Mercedes-Benz y dos pilotos que no destacan por su capacidad técnica, el resultado es que Lotus pasó de sumar 315 puntos en 2013 a 10 el año pasado, es decir, un 97% menos de puntos...

Amenaza fantasma

¿Y por qué deberían preocuparse Fernando Alonso y McLaren-Honda de un equipo que parece en franca decadencia? Pues porque, aunque en las carreras uno más uno raramente son dos, hay apuestas que podemos dar por seguras, y una de ellas, al menos de cara a 2015, es que la unidad de potencia de Mercedes seguirá siendo el rival a batir, salvo que los japoneses de Honda den la campanada, en cuyo caso, Fernando Alonso y McLaren no tendrán que preocuparse por nadie. Como es complicado que el propulsor nipón llegue en plena forma a los primeros Grandes Premios, bien harían en Woking por preocuparse primeramente de los rivales que monten la unidad de potencia de la marca de la estrella y entre ellos está, sí, Lotus, equipo que por primera vez desde 1994 (cuando aún eran Benetton), no equipará una mecánica de origen Renault, de ahí que todos hayamos olvidado que, de cara a 2015, puedan ser una seria amenaza.

De momento, el E23 ya es un monoplaza mucho más convencional que su predecesor. Además, es fruto de muchos más meses de trabajo que sus rivales, pues el equipo renunció al desarrollo del E22 cuando vio que la apuesta había salido cruz. Nada indica que en Lotus se hayan olvidado de hacer monoplazas de Fórmula 1, y además cuentan con una notable ventaja, y es la estabilidad, técnica y presupuestaria. También continúan los dos pilotos. Ambos se curtieron con un coche inconducible en 2014, haciendo gala además de un espíritu de equipo encomiable.

Si Williams fue capaz de dar un salto de calidad tan grande de un año a otro, ¿cómo no va a poder darlo Lotus? Hablamos de un equipo mucho más acostumbrado a ganar en los últimos años y, por lo tanto, mucho más peligroso que Williams, no hay duda. McLaren-Honda se equivocaría gravemente en caso de desdeñar la capacidad del binomio Lotus-Mercedes para convertirse en uno de los protagonistas del campeonato 2015. Un rival más, mucho más inesperado, en una ‘guerra’ que puede resultar a varias bandas: Mercedes, Red Bull, Williams, Lotus y, por qué no, McLaren y Ferrari.