GP EspañaVerstappen hace historia en el carrerón de Montmeló

Historia del deporte: Max Verstappen ha ganado el GP de España de Fórmula 1 en su primer fin de semana como piloto del equipo Red Bull, por delante de Kimi Räikkönen y de Sebastian Vettel. La carrera que ha protagonizado un chico de 18 años, 7 meses y 16 días ya forma parte de la leyenda del automovilismo. Fue el mejor colofón de una carrera de las que hacen afición, y que comenzó con un golpe de teatro que traerá cola.

En una palabra: drama. Así se puede resumir el GP de España de Fórmula 1, que empezó con un golpe de guión de los que hacen historia y fomentan que la afición se enganche. Nico Rosberg y Lewis Hamilton acabaron fuera de carrera en la curva cuatro cuando el alemán, que había cogido la primera posición, fue embestido por el británico, que intentó entrar por donde no se podía. Los comisarios, tras la carrera, decidieron que había sido un incidente de carrera.

Más allá de la guerra que se pueda abrir en Mercedes, y de las innegables consecuencias que esto vaya a traer, sin los dos grandes dominadores de la carrera se abrió la puerta a lo desconocido: hay que remontarse a Bélgica 2014 para ver la última vez de los dos Mercedes fuera de carrera. Esto permitió a los Red Bull y a los Ferrari luchar por la victoria, con Daniel Ricciardo y un heroico Max Verstappen llevando la batuta en buena parte de la prueba, mientras por detrás los coches de rojo intentaban romper con el muro de sus rivales.

Abandono de Alonso

Mientras por delante los Red Bull y los Ferrari se batían el duelo en pista y en la estrategia, por detrás venían los problemas para Fernando Alonso. El piloto español, desde un principio, no tuvo su día: salió mal, la estrategia no le benefició y no encontró el ritmo. En la vuelta 47, después de un par de giros en los que ya se notaba con problemas, la unidad de potencia de su McLaren dijo 'basta' y se quedó parado en el lateral de la curva 9, justo donde hace poco más de un año tuvo ese temible accidente en la pretemporada. Es el décimo abandono de Alonso en 22 carreras en esta nueva etapa con McLaren Honda.

Minutos antes, Nico Hülkenberg había dejado su coche fuera de carrera, después de que un incendio en el motor le obligase a abandonar.

La emoción se puso al límite en la parte superior. Las estrategias, totalmente distintas, de Ferrari y Red Bull separó en dos grupos a los líderes: por un lado, Verstappen (el piloto más joven de la parrilla) con Räikkönen (el más veterano), y por otro, los ex compañeros Vettel y Ricciardo. Los doblados premiaron a los dos primeros y perjudicaron a los de atrás, que acabaron luchando por el tercer puesto de la clasificación hasta que un inoportuno pinchazo en la última vuelta lastró definitivamente al australiano. Entró cuarto gracias a que contaba con una ventaja de casi 50 segundos con el siguiente.

Más atrás, en sexta posición, acabó un Carlos Sainz que poco más pudo hacer. Justo detrás de Valtteri Bottas, el español demostró que está en condiciones de ser el líder indiscutible de Toro Rosso, ya que Daniil Kvyat ni estuvo ni se le esperó en la zona alta de la tabla. El sexto puesto de Sainz estuvo en el aire hasta el último instante, ya que los comisarios le investigaron por salir de boxes a hacer la vuelta de formación con el semáforo rojo, pero finalmente no le castigaron.

Al final, y casi nadie se lo podía creer, Max Verstappen se confirmaba como el flamante vencedor de un Gran Premio que ya forma parte de la historia del automovilismo, por delante de Raikkonen y de Vettel.

Fotos: Red Bull