GP México - CarreraVerstappen conquista México y Hamilton se proclama pentacampeón

Max Verstappen consiguió su quinta victoria en Fórmula 1, al imponerse desde el principio al final en un emocionante y más tenso de lo esperado GP de México. El holandés fue acompañado en el podio por Vettel y Räikkönen, que dejaron fuera del podio al gran ganador del año.

Y es que Lewis Hamilton ya es, matemáticamente, campeón del mundo de Fórmula 1 por quinta vez. El británico sufrió de lo lindo para aguantar con unos neumáticos que se le deshicieron (los tres juegos que montó), lo que le hizo caer del podio después de nueve carreras. Irónicamente, le sirvió para atar el título.

Para los españoles fue una carrera para olvidar: Alonso abandonó en la vuelta 1 y Sainz, en la 30.

Salida 'webberiana' de Ricciardo

A Daniel Ricciardo le duró muy poco el primer puesto. Exactamente, los metros que hay desde la parrilla hasta la primera curva, en la que llegaron prácticamente en paralelo su compañero Max Verstappen y un Lewis Hamilton que no quería contemporizar en su búsqueda del pentacampeonato.

Por detrás, Bottas se tocó con un rival, mientras Carlos Sainz se aupaba a la sexta posición tras quitarse de encima a Hülkenberg pero mucho peor fue lo que le pasó a Fernando Alonso. El asturiano se encontró con un trozo de un Force India, el de Esteban Ocon, que perdió po un toque por detrás de un Sauber. Además de perder unas posiciones, al principio, duró apenas cuatro vueltas antes de verse obligado a dejar el coche aparcado. La gira estadounidense del español se zanja con menos de una vuelta en Austin y menos de cuatro en México.

El KO de Alonso llegó justo antes de que a Lewis Hamilton le empezase a pasar factura el inicio de la carrera. El 'graining' en el tren delantero de su Mercedes le hizo perder mucho tiempo, toda vez que Daniel Ricciardo lo aprovechó para ponerse a rueda.

Los problemas de Hamilton no se redujeron tras la parada. Los superblandos que montó el máximo candidato al título duraron poco más de 10 vueltas antes de que empezaran a mostrar de nuevo 'graining', mientras Ricciardo le vigilaba a una distancia de unos dos segundos.

Sainz abandona; Hamilton cae del podio

La carrera se había estabilizado, hasta el punto de que Verstappen se puso a doblar pilotos como si lo fueran a prohibir. En esas estaba, con Carlos Sainz en su punto de mira, cuando vio que el Renault del madrileño hacía un extraño antes de irse a la escapatoria de la entrada al vistoso estadio. El motor del español dijo basta.

Mientras, Hamilton siguió sufriendo una auténtica sangría de ritmo con los neumáticos superblandos. El 'graining' del coche del piloto británico le privó no sólo de luchar por la victoria, sino siquiera de aguantar el podio. Primero, fue Vettel quien le quitó el segundo puesto y, después, fue Ricciardo.

De hecho, el inglés casi acaba mucho peor que fuera del podio cuando se salió mientras se defendía de los envites del hombre de la pole.

Con la parada de Verstappen en la vuelta 50, el holandés ató su quinta victoria en Fórmula 1, pero por detrás quedaba mucho por decidir.

Hamilton se desespera y Ricciardo, más

Mientras el de Red Bull se iba por delante, Daniel Ricciardo mostraba un sorprendente buen ritmo con unos neumáticos superblandos con más de 40 vueltas. Hasta el punto de que marcó la vuelta rápida de carrera, mientras se defendía de un Vettel con un gran ritmo.

A poco más de 15 vueltas para el final, los ultrablandos de Hamilton ya mostraba 'graining' de nuevo, mientras él se quejaba amargamente de que "definitivamente algo no va bien" en su monoplaza, porque no era capaz siquiera de cazar a un Räikkönen con superblandos con unas ruedas con más de 40 vueltas.

Pero mucho peor fue lo de Daniel Ricciardo. A diez vueltas del final, el que había marcado la pole el día anterior veía cómo su motor se rompía. Es el octavo abandono del australiano, más que nadie de la parrilla.

Tras este KO, Verstappen empezó a temerse lo peor. Rápidamente empezó a avisar por radio de que si oían algo raro en su motor, que le avisasen para reducir el ritmo. Más de 15 segundos de ventaja frente a los Ferrari le daba margen para hacerlo. Al final no le hizo falta y conquistó su quinta victoria en Fórmula 1.

Para Lewis Hamilton fue toda una tranquilidad ver el KO de Ricciardo, ya que se estabilizó la carrera y se pudo permitir el lujo de no apretar y atar, no sin sudar, su quinto campeonato del mundo.

Fotos: Mercedes