Vettel nos habla de su cuarto triunfo del año

Ayer, Sebastian Vettel ganó la cuarta carrera del año, de las 5 disputadas hasta el momento.

Nuevamente le ganó la partida al resto, cosechando un nuevo éxito para el RB7 de Adrian Newey.

Pero si Turquía fue un paseo para él, en Montmeló quiso demostrar a todo el mundo, que también era capaz de ganar una carrera, sin ir primero y tirar.

En la salida, a pesar de ganarle la posición a Webber, éste la perdió con Alonso, que realizó una maravillosa, con lo que se tuvo que conformar con la segunda posición.

Al entrar tan pronto a hacer su primer cambio de neumáticos, salió con tráfico, y para no perder tiempo con la cabeza, tuvo que realizar algunas maniobras arriesgadas, adelantando a los pilotos que en ese momento luchaban incluso por el podio, entre ellos Massa, Button y compañía.

Pero pudo deshacerse de estos coches rápidamente, a pesar de la dificultad que presenta el Circuit de Catalunya para las maniobras de adelantamiento.

A partir del segundo stint, quedó claro que su lucha en realidad estaba con Lewis Hamilton, el único piloto capaz de seguir el ritmo del todo poderoso Red Bull. Incluso parecía ser superior, pero el vigente campeón del mundo no quiso apoderarse del miedo, y lleno de confianza en sí mismo, hizo su carrera para llevarse para su casa un nuevo triunfo.

"Mclaren, y en especial Lewis eran muy fuertes y se quedaron más rato en pista", comienza explicando el piloto alemán en relación al baile de gomas que empezó relativamente pronto en la carrera. "Tenían una estrategia diferente, que le llevaron hasta la segunda posición. Entonces tenía claro: esto puede estar muy ajustado. En las últimas vueltas me sentía un poco como en China". Esa carrera, de hecho, la ganó Lewis Hamilton. Vettel perdió su primera plaza, pues la estrategia a 3 paradas del piloto de Red Bull, resultó ser una mala elección, ya que las 4 paradas de Hamilton lo catapultaron hacia la victoria.

Sobre todo con el neumático duro parecía tener especiales problemas Sebastian. "Mis gomas dejaban de funcionar y rezaba porque Lewis también tuviera problemas, pero al final fue recuperando. Parecía ser realmente más rápido, sobre todo en el último sector. Siempre llegaba a la zona de adelantamiento, y podía activar el DRS, cuando estábamos en la recta".

"Al final de la recta miraba por mi retrovisor, y le veía directamente detrás de mí. No sabía si me tenía que defender o no. Estuvo realmente apretada la cosa. En las últimas dos vueltas logré hacer un buen sector final y eso fue suficiente para mantener mi posición".

Pero no solo la gran competitividad de Mclaren puso en apuros a Vettel, sino los problemas propios, ya casi habituales, que sufría Red Bull. Pues no siempre podía utilizar Vettel el kers, con lo que no podía defenderse en condiciones ante los ataques constantes de Lewis.

"Así que no fue una carrera fácil". Lo cual es bueno para el espectáculo, pues hemos podido ver a un Sebastian Vettel maduro, capaz de mantener la cabeza fría en una batalla dura con Lewis Hamilton, un piloto al que no le gusta ceder ni un cm.

"Es una carrera sensacional. Después del sábado, se decía que éramos muy rápidos. Mucha gente predijo que la batalla sería entre Mark y yo. Pero como todos hemos visto, Ferrari se hizo con la primera plaza en la primera curva. Y Mclaren nos presionó muy duramente".