Técnica F1[Vídeo] F1 2018: análisis técnico del GP de China

Tras un inicio cargado de novedades, como es habitual en el inicio de temporada, el Gran Premio de China ha supuesto una ralentización en el ritmo de implementación de cambios en los monoplazas de la parrilla. La mayor parte de los equipos trabaja en modificaciones de importancia que se comenzarán a probar con la llegada de las carreras europeas, en las que la logística se simplifica considerablemente al estar establecidas sus respectivas sedes en Inglaterra, Suiza o Italia.

McLaren

Los de Woking continúan realizando pequeños cambios como consecuencia de la escalonada introducción del paquete aerodinámico que estaba previsto para el Gran Premio de Australia y que debió ser pospuesto tras los problemas de fiabilidad encontrados en los test de pretemporada.

En esta ocasión, McLaren ha eliminado el perfil horizontal situado en el borde posterior del capó motor para sustituirlo por un flap Gurney (1) algo más discreto. Ambos buscan, aunque de modos distintos, mejorar la refrigeración interna a través de una mejor circulación del caudal aerodinámico -tanto interno como externo- a su llegada al borde de fuga en el que se sitúan.

Adicionalmente, McLaren ha modificado los cortes longitudinales (2) situados en el suelo del monoplaza y que se han posicionado a continuación de los nuevos deflectores laterales estrenados en Bahréin, llegando hasta la inmediaciones de las ruedas traseras. Estos elementos son vitales para el buen funcionamiento de la aerodinámica inferior, responsable de casi la mitad de la carga aerodinámica total del coche.

Toro Rosso

Los italianos están viviendo una montaña rusa de sensaciones en este inicio de temporada con resultados muy dispares entre sí. La última novedad, que forma parte del paquete de modificaciones visto por primera vez en Bahréin, es la sustitución de los dos flaps secundarios finales del alerón delantero por tres más pequeños y estilizados (3). De ese modo, Toro Rosso busca generar una mayor cantidad de carga aerodinámica, aunque ésta podría ser más difícil de controlar en determinadas condiciones.

Sauber

Finalmente, nos fijamos en una modificación característica del circuito de Shanghái, que cuenta con temperaturas muy distintas de las vividas en Bahréin una semana antes. En el trazado de Sakhir muchos equipos optaron por utilizar cubiertas motor muy voluminosas para fomentar una mayor refrigeración de los elementos internos como medida contra las altas temperaturas.

En China, con registros térmicos de hasta 20 ºC menos, dichas cubiertas volvieron a ser lo más ceñidas posible, aumentando así la eficiencia aerodinámica. Sauber en un claro y evidente ejemplo de ello, pues el C37 cambió su capó motor asimétrico y de gran volumen por el inicialmente usado en los test de pretemporada de Barcelona (4).