¡Así sí! El vídeo del genial duelo en pista entre Leclerc y Verstappen

Quizá fue la presencia de un nuevo director de carrera como Niels Wittich, que ha comenzado su mandato con mayor rigor que el aplicado por Michael Masi en el pasado. O tal vez la buena relación entre Max Verstappen y Charles Leclerc, algo que no se puede decir de la que mantienen el neerlandés y Lewis Hamilton.

Sea como fuere, el duelo que ambos nos regalaron en la disputa por la victoria en el Gran Premio de Bahréin no se pareció demasiado a los últimos que protagonizaron Verstappen y Hamilton el año pasado.

En esta ocasión, tanto Charles Leclerc como el vigente campeón del mundo se comportaron de manera impecable, algo que propició aún más diversión y espectáculo a los aficionados, y que nos da pie a rememorarlo de nuevo.

Leclerc, muy inteligente

Ya en la misma salida, ambos pilotos pugnaron por posición con limpieza. Ambos arrancaron de manera muy similar, lo que permitió a Leclerc proteger el interior y hacer inútil la frenada tardía de Max Verstappen, que viéndose obligado a trazar la primera curva por fuera tenía las de perder.

Sin embargo, en la vuelta 17 de carrera y tras producirse las primeras paradas en boxes, Max Verstappen encontró una nueva oportunidad en la recta de meta y, tras coger el rebufo del Ferrari y aprovechar el DRS, cogió el interior de la curva 1 para adelantar a Charles Leclerc.

Lo que no esperaba el de Red Bull es que Leclerc opusiera tan poca resistencia en esa frenada para prepararse la aceleración hacia la curva 2 y la recta posterior a la misma. De un modo muy inteligente, el monegasco le devolvió la maniobra a su oponente con una limpia maniobra por el exterior en la curva 3, recuperando el liderato.

Pero el duelo no había terminado y, en la siguiente vuelta, Max Verstappen repitió la maniobra, aunque esta vez tirándose al interior de la curva 1 desde más lejos. De nuevo, Leclerc no planteó resistencia, sabedor de que pasando este viraje segundo podría abrir el DRS en la siguiente recta.

Así lo hizo, repitiendo la maniobra de la vuelta anterior en la curva 3, aunque en esta ocasión por el interior. ¿Lo mejor de todas estas maniobras? Que ninguno de los dos intentó en ningún momento expulsar al otro de la pista, una maniobra que en los últimos años se ha convertido en habitual en una Fórmula 1 dominada por las escapatorias de asfalto.

Verstappen, enfadado

El resto de la carrera fue dominada por Charles Leclerc, que tras alejarse de su oponente lo suficiente para no permitirle utilizar el DRS, comenzó a imponer su ritmo y se alejó poco a poco de Verstappen, que dejó muy claro a su equipo su malestar por haber obedecido la orden de tomarse con calma la primera vuelta tras cada parada en boxes.

En cualquier caso, nada de eso tuvo consecuencias en el resultado final de Max Verstappen, pues un problema con la dirección asistida y otro más con la bomba de gasolina acabaron dejándolo a merced de Carlos Sainz y, finalmente, de un doloroso abandono. Por su parte, Charles Leclerc se anotó la primera victoria de la temporada.

¿Viviremos un nuevo duelo entre los Ferrari y Red Bull en el Gran Premio de Arabia Saudí que se disputa este fin de semana? ¡Así lo esperamos!