[Vídeo] Resumen del GP de Singapur de F1 2018
Una discreta carrera en el circuito urbano de Marina Bay deja victorioso a un Lewis Hamilton que disfruta ahora de 40 puntos de ventaja en el campeonato sobre Sebastian Vettel. Por otro lado los españoles, a pesar de no clasificar entre los diez primeros, se convirtieron en los mejores del resto gracias a un ritmo consistente y una buena estrategia.
5 min. lectura
Publicado: 17/09/2018 12:30
El Gran Premio de Singapur nos dejó una discreta carrera en cuanto a batallas en la pista. Si bien los adelantamientos son normalmente maniobras de riesgo, aquí entre los muros de Marina Bay el riesgo se acrecenta aún más. Las estrategias de los equipos no ayudaron, ya que los ingenieros se encargaron de evitar en la medida de lo posible una segunda parada en las calles de boxes. De esta manera y tras el accidente de Esteban Ocon a las primeras de cambio con su compañero de equipo, la carrera se configuraba como la antítesis a un 'sprint', es decir, que la clave era evitar que las gomas de Pirelli se vinieran abajo demasiado pronto.
La primera decena de vueltas estuvo marcada por la ralentización que provocó a drede el líder de la prueba Lewis Hamilton. El británico comenzó a rodar el doble de lento que en circunstancias normales. Si normalmente el ritmo de carrera es de media unos seis o siete segundos más lento que los tiempos de clasificación, en estos momentos se rodaba por encima de los diez o incluso los doce segundos con respecto a los tiempos del sábado. Sin embargo cuando nadie lo esperaba, el de Mercedes comenzó a apretar dejando atrás a Vettel y Verstappen que hasta hace un momento estaban en zona de DRS.
Ferrari y las paradas, otra vez
Con el repentino aumento de ritmo del '44', los de Maranello optaron por hacer parar a Sebastian Vettel para colocarle los neumáticos ultrablandos, o lo que es lo mismo, plantearon una estrategia a dos paradas que por aquel momento era inviable. Para colmo, la maniobra precipitada de los de rojo sacó a su piloto justo por detrás de Sergio Pérez, y aunque se deshizo de este rápidamente, el tiempo que perdió tras el mexicano fue suficiente como para dar por perdido a Hamilton y salir rueda a rueda con un Verstappen que le acabaría robando el segundo puesto a la salida del pitlane. Ferrari se acababa de autoeliminar de esta manera de la lucha por la victoria, y ahora Vettel, a pesar de contar con mejor neumático que el holandés, tendría que resignarse a gestionar sus neumáticos hasta el final para minimizar daños y evitar así una catastrófica segunda parada.
La Q3 puede salir cara
Las características del Gran Premio de Singapur provocaron que el compuesto más blando de los que traía Pirelli, el neumático hiperblando de la banda rosa, se convirtiera en un compuesto exclusivo de clasificación. Por tanto aquellos que clasificaron entre los diez primeros salían con unas gomas que se iban a desintegrar literalmente a las pocas vueltas. Esto para los 'seis de arriba' no supuso un gran problema, sin embargo, el resto de los que clasificaron dentro del 'Top10' salían de primeras con una clara desventaja respecto a los eliminados en Q2. Alonso y Sainz, que salían inmediatamente detrás de Grosjean, Hulkenberg y los Force India tenían prácticamente los mejores puestos 'del grupo de los mortales' a su alcance gracias a la posibilidad de elegir neumático.
Montando los ultrablandos, los españoles sólo tenían que gestionar los espacios hasta que sus rivales parasen, se encontrasen con tráfico, y a base de ritmo se abriera el hueco suficiente como para hacer un 'overcut' múltiple. La teoría y la práctica coincidieron a la perfección, ya que con una buena arrancada, la eliminación de Ocon y el tapón de Sirotkin a Pérez, Grosjean y Hulkenberg, los españoles acabaron clasificados tras los de arriba, en séptima y octava posición respectivamente. Como siempre, analizamos también en formato vídeo lo más destacado de la carrera del Gran Premio de Singapur.