La nueva herramienta que ha permitido a Williams avanzar, y mucho, con el FW47

Ahora que han terminado los test de pretemporada, existe consenso a la hora de señalar a Williams como el equipo revelación y que más opciones tiene de liderar el grupo perseguidor de los cuatro grandes de la parrilla.

Aún es pronto para que Williams se plantee desafiar a McLaren, Ferrari, Red Bull y Mercedes, pero si se cumplen los pronósticos supondrá todo un triunfo pasar de la penúltima posición del campeonato de constructores a luchar por la quinta.

«Todavía no estamos disparando a toda máquina, pero eso sucederá en el transcurso de 2025»

Williams se moderniza

En los últimos meses, te hemos hablado en varias ocasiones del déficit acumulado por Williams en los últimos años en materia de infraestructura y recursos, no sólo a nivel tecnológico, sino también organizativo.

James Vowles lleva más de un año trabajando en este asunto y, poco a poco, empiezan a verse los primeros frutos de dicho esfuerzo. Ahora, el director del equipo británico siente que Williams es ya un equipo digno de la Fórmula 1.

«¡No usamos una hoja de cálculo de Excel!», comienza diciendo Vowles al ser preguntado por los cambios experimentados en Williams de cara a la concepción del FW47 de esta temporada. «El gran cambio es que estamos utilizando herramientas modernas que son el punto de referencia de lo que necesitamos hacer».

Ahora, en lugar de una rudimentaria y caótica hoja de cálculo, Williams utiliza un nuevo sistema que permite al equipo operar a un nivel de eficiencia similar al de sus rivales.

«Básicamente, lo que llamamos ERP (Enterprise Resource Planning), MRP (Material Requirements Planning), PLM (Product Lifecycle Management), los sistemas utilizados para saber qué piezas tienes, dónde están y cuáles son los materiales que tienes, etc.», explica James Vowles.

El ingeniero británico admite que este salto de sofisticación supone una gran mejora, pero también plantea nuevas dificultades que poco a poco se están superando. «Ahora estamos usando sistemas de referencia. Todavía hay trabajo por hacer, porque una vez que introduces eso, con ello vienen una gran cantidad de problemas».

«Por lo tanto, todavía no estamos disparando a toda máquina, pero eso sucederá en el transcurso de 2025», prosigue James Volwes, que recientemente también confirmó otras inversiones en infraestructura y tecnología.

El Williams FW47, primer producto de la nueva era

Si bien Williams todavía tiene camino por delante en su afán de equipararse a los equipos punteros en recursos, fuerza laboral y tecnología, podemos decir que el coche de 2025 es el primer resultado tangible del trabajo realizado hasta el momento.

«Ahora nos basamos en el proceso y la estructura. Siempre te afecta un poco cuando haces la transición [pasar por el proceso de modernización de estos sistemas], pero el FW47 es un testimonio de hacia dónde vamos», afirma James Vowles.

A grandes rasgos, el nuevo sistema de gestión y control constituye una organización jerárquica para cada componente, un mapa que puede consultarse y recorrer con rapidez.

Ahora, cada pieza del FW47 puede visualizarse de forma individual o como parte del conjunto en pantalla, permitiendo además desglosar y clasificar en detalle los materiales y componentes necesarios para su fabricación.

En concreto, el módulo PLM permite registrar rápidamente el tiempo de uso de cada pieza en el monoplaza, facilitando el control de su vida útil y anticipando cuándo será necesario reemplazarla.

Todo ello ha contribuido de forma esencial a hacer posible el aspecto más relevante para Williams de cara a los test de pretemporada de 2025: que, tras las dificultades afrontadas en la construcción del coche de 2024, en esta ocasión ha logrado desarrollar un monoplaza en el que confiar plenamente.

Y los resultados en pista así lo avalan.

Fuente: Autosport.comFotos: Williams Racing