GP AustraliaWilliams vuelve a ser la incógnita de los viernes

Algunos de los prometedores tiempos obtenidos durante los test de pretemporada en Barcelona hacían indicar que el potencial real del Williams FW40 podría estar más cerca de Red Bull y Ferrari de lo que se podría creer en un principio. La mayoría de las estimaciones apuntan a que el equipo de Grove ocupará un lugar baldío entre los tres grandes y el resto, pero, por ahora, los entrenamientos libres del Gran Premio de Australia no han servido para despejar dudas, si no más bien para crear aún más.

El equipo británico se vio especialmente perjudicado en la sesión de la tarde, en la que un problema mecánico de cosecha propia y una bandera amarilla por el derribo de un bolardo les impidió conseguir tiempos más representativos con los neumáticos ultrablandos. La cosa había ido algo mejor por la mañana, pero la diferencia con los Ferrari era de casi ocho décimas de segundo, y tanto los Force India como los Toro Rosso terminaron con tiempos muy similares. Felipe Massa lideró por la mañana los esfuerzos de Williams con un 1:26.142, ubicándose séptimo. Por desgracia para él, un problema en la caja de cambios le dejó tirado con 55 minutos de sesión vespertina por delante, perdiendo la oportunidad de hacer una vuelta rápida con neumáticos ultrablandos, y de completar simulaciones de carrera.

El piloto brasileño lamentó la situación y aportó algo más de luz a su problema: "La pista estaba aún un poco sucia, y de repente tuvimos un problema en el coche. Se puso en neutral, y no podía engranar ninguna marcha. Por eso, perdí la oportunidad de probar los neumáticos ultrablandos y de hacer tandas largas. Realmente, no ha sido el gran día que estábamos esperando. Es una pena que hiciésemos miles de kilómetros en Barcelona y que hayamos tenido este problema aquí, pero no creo que sea algo serio. Tenemos que concentrarnos al 100% mañana, y esperar que las cosas vayan en la dirección correcta".

El día del canadiense Lance Stroll fue bastante más apacible. El nuevo piloto de Williams se limitó a ir por el sitio para minimizar los riesgos de un posible percance que comprometiese su primer fin de semana en la Fórmula 1, y ese jugar sobre seguro se notó en los tiempos: 13º por la mañana con un 1:26.734, y 16º por la tarde, mejorando apenas dos décimas, y a dos de su compañero. Stroll ha afirmado que "es genial poder romper al fin el hielo y pilotar un poco, en especial porque ha habido una larga preparación para aclimatarme. He hecho algunas vueltas, aprendiendo el trazado. No es un circuito en el que haya estado antes, así que no puedo salir e ir al límite. Tengo que ir poco a poco, lo que estaba haciendo hoy, y dejar aún un poco de margen. No hay lugar para el error en este circuito, pero es rápido, y he disfrutado pilotando en él".

Stroll explicó que una bandera amarilla causada por restos en pista fulminó sus opciones de una vuelta más competitiva, y espera seguir progresando junto con el coche: "Los libres 2 fueron una sesión un tanto miserable, porque tuve que abortar la vuelta por una bandera amarilla, y perdimos la vuelta que queríamos con los ultrablandos. No obstante, hoy sólo eran las primeras sesiones de libres. Creo que aún podemos mejorar mientras aprendo un montón, y aún hay mucho que entender".

Fotos: Williams Racing