Wolff: Hamilton y Vettel, "sin contemplaciones" a partir de ahora

Hasta el Gran Premio de Azerbaiyán, habían sido muy pocas las situaciones en las que Lewis Hamilton y Sebastian Vettel habían tenido una confrontación pública. Ambos pilotos han sido los dos grandes protagonistas de los dominios de la actual década, llevándose todos los mundiales entre 2010 y 2015, pero apenas se han enfrentado de forma directa por uno.

En 2010, eran parte de una pelea más grande con pocas individualidades, y en 2012 Hamilton se quedó a medio camino por problemas mecánicos. Desde 2014, Vettel se había limitado a pelear por ser el mejor del resto... hasta este año, en el que la igualdad entre Mercedes y Ferrari ha conducido a un duelo entre ambas estrellas. Dado que los finlandeses parecen cómodos en su rol de acompañante, y que Red Bull no tiene las armas para ganar en condiciones normales, ambos pilotos protagonizan una esperada pelea que, hasta ahora, había transcurrido en términos respetuosos y basados en la competitividad.

Todo ello, claro, hasta Bakú, donde el "no frenazo" de Hamilton y el posterior toque de Vettel, la sanción al alemán, las declaraciones de ambos pilotos tras la carrera y la investigación de la FIA para evaluar una ampliación de las medidas hacia el piloto de Ferrari han caldeado el ambiente de forma significativa. En ello, Mercedes tiene claro que su piloto es la víctima de la situación, habiendo recibido el golpe y perdido dos puntos con Vettel en aquella carrera.

Así lo ve el jefe de Mercedes AMG F1, Toto Wolff, que confía en que la FIA tenga en cuenta el ejemplo dado para determinar una sanción mayor a Vettel, según recoge RACER: "Antes de nada, Lewis no hizo nada mal, lo hemos visto en los datos. Sólo tenemos que ser conscientes de que hay millones de personas mirando, y muchos de ellos son jóvenes pilotos con aspiraciones. Lo que hagamos en la pista va a ser un ejemplo, y quien se lleva la sanciones sienta un precedente. Hay que juzgar eso también. Espero que Charlie (Whiting) y los demás lo hayan considerado". Pese a ello, Wolff no perseguirá activamente ese castigo mayor: "De todos modos, no quiero atacar a posteriori: se impuso una sanción, los comisarios han decidido, y mi mente ya está en Spielberg".

Lo que hagamos en la pista va a ser un ejemplo, y sienta un precedente. Espero que Charlie lo haya considerado

En Mercedes, son expertos conocedores de las tensiones que puede desencadenar la consecución de un campeonato de pilotos. Ellos mismos lo vivieron de primera mano en su propio box, con Hamilton y Nico Rosberg en 2014 y 2016, y Wolff entiende que la dinámica cordial no puede progresar a medida que avanza el año: "Aceptamos que llevamos ocho carreras y que se respetan mucho el uno al otro, y ahora tenemos esta situación en la que hay más controversia. Creo que el respeto entre los dos grandes de su deporte, fundamentalmente, está ahí, y estos eventos no ayudan a la relación en el futuro. Estaba claro que esto podía ocurrir cuanto más apretado estuviese. Nadie quiere ver la cháchara, de todos modos, así que ahora van sin contemplaciones".

Wolff, a pesar de todo, opina que en la Fórmula 1 debería reinar un mayor ambiente de camaradería entre equipos una vez los motores se apagan, dejando claro que no hay ningún tipo de animosidad hacia Ferrari: "Por supuesto, en retrospectiva, es una compañía fantástica y una gran marca. Hay mucha gente apasionada en Ferrari, y que animan a Ferrari en Italia. Para mí, la analogía es el rugby: durante la carrera, son nuestros enemigos y no tenemos contemplaciones, pero debemos ser capaces, una vez que la carrera ha acabado, de tomar una cerveza como hacen los jugadores de rugby, de reconocer el rendimiento de alguien y que todos somos guerreros y duros competidores en la pista. Competimos en una plataforma conjunta, y eso nos une de algún modo".

Fuente: RACERFotos: Mercedes AMG F1