Apollo Power comienza la producción de estos innovadores paneles solares flexibles que ya utilizan Amazon y Volkswagen

El desarrollo de las energías renovables se encuentra en pleno auge gracias a la cada vez mayor integración de las mismas en el mix energético mundial.

Pero, para consolidar su crecimiento, es esencial que la tecnología encuentre formas de democratizar la energía y, en ese sentido, la solar tiene aún mucho camino por recorrer.

Aunque las granjas solares y las instalaciones fotovoltaicas son cada vez más numerosas, los paneles solares tienen aún algunas limitaciones que conviene vencer para mejorar su rentabilidad, adaptabilidad y rendimiento.

Una inversión de 26,5 millones de euros

Israel cuenta con empresas potentes en el sector tecnológico relacionado con la energía. StoreDot, el fabricante de baterías, es quizá el más conocido de ellos, pero no es el único.

Apollo Power también tiene presencia relevante en el sector, aunque en su caso se ha especializado en la energía solar. Y se ha convertido en noticia porque acaba de iniciar la producción de sus paneles fotovoltaicos flexibles de alto rendimiento.

Apollo Power ya cuenta con múltiples proyectos en ejecución.

En concreto, hablamos de una instalación de 10.000 metros cuadrados situada en el Parque industrial y científico Mevo Carmel de Yokneam, ubicado en el norte de Israel.

Dicha factoría, producto de una inversión de 26,5 millones de euros, tiene como objetivo alcanzar una producción anual de 1,5 millones de metros cuadrados de películas solar, lo que equivaldría a unos 190 MW.

Los paneles solares de Apollo Power

Apollo ha creado una tecnología para producir películas solares flexibles, livianas y eficientes que pueden convertir cualquier superficie expuesta a la luz solar en una fuente de energía eléctrica.

Los paneles solares son ideales para aplicaciones en superficies como las de automóviles, camiones, techos y aviones que no pueden soportar el peso de los paneles solares de vidrio.

Cada unidad básica de la película solar mide 12 metros cuadrados y pesa 3 kilogramos por metro cuadrado. Apollo también cuenta con una película fotovoltaica flotante para producir electricidad sobre el agua, siendo resistente a las olas y siendo adecuada también para todo tipo de embarcaciones.

«Esta instalación innovadora y automática se construyó en un año y medio», explica Oded Rozenberg. El director general de Apollo Power también señala que para ello se ha «utilizado tecnología innovadora que hemos desarrollado nosotros mismos, para hacer realidad nuestra visión de generar electricidad a partir de cualquier superficie expuesta al sol».

«El potencial es infinito», afirma Rosenberg. «La tecnología de nuestra película solar flexible es particularmente adecuada para la instalación en techos ligeros y depósitos de agua y el mercado automotriz».

Socios de gran envergadura

La inauguración de la fábrica de Apollo coincide con el primer acuerdo comercial en el sector automotriz firmado con Volkswagen, que incluye el suministro de decenas de miles de láminas solares en un acuerdo valorado en 33 millones de euros. Los paneles solares se integrarán en los vehículos Volkswagen a partir de 2024.

Además, Apollo está trabajando con Audi para integrar paneles solares ligeros y flexibles en los techos de sus vehículos eléctricos. La compañía también tiene proyectos con Hyundai, Renault y Geely.

En febrero del año pasado, Amazon encargó a Apollo instalar láminas solares en un centro logístico en Francia y en una acera con un sustrato de caucho reciclado para generar energía solar.

En septiembre, la empresa israelí también acordó suministrar paneles solares flexibles a Tadiran Solar como parte de un acuerdo para que este sea el distribuidor exclusivo de Apollo en el mercado de techos livianos en Israel.

Fotos: Apollo Power