4 claves sobre poner placas solares (y 4 mitos desmentidos)

Las placas o paneles solares nos acompañan desde los tejados de muchas viviendas desde hace años, pero en los últimos dos han proliferado de manera espectacular. De esto tienen culpa dos motivos principalmente: la cada vez mayor concienciación sobre la crisis climática y el imparable alza de los precios de la energía.

Pero acometer una instalación fotovoltaica es algo que a muchos les parece complicado y demasiado caro. Además, existen determinados mitos que juegan en contra de este tipo de producción de energía solar.

Para ayudarte a entender lo que realmente implica tener una instalación de paneles solares, vamos a darte algunas claves y a desmentir algunos mitos sobre ellos.

Las placas solares en 4 claves

Si te estás planteando instalar paneles solares en casa, seguro que tienes algunas dudas al respecto. Vamos a intentar resolverlas.

1. ¿Dónde se instalan las placas solares?

Seguro que la respuesta te llega a la mente muy rápidamente: en el tejado de la vivienda. Es cierto que es el lugar más habitual, pero no es el único.

Los grandes parques solares se pueden incluso instalar en el agua mediante una estructura flotante, pero lo que nos ocupa en esta ocasión es una vivienda particular. Siempre que sea posible hacerlo en el tejado, mejor que mejor. Pero también es posible hacerlo en una parte de la parcela que tengas, es decir, en el mismo suelo.

No sólo eso, incluso se comercializan paneles solares en forma de baldosa o teja para instalar en terrazas, caminos y para minimizar el impacto estético de la instalación.

En cualquier caso, es necesario que la empresa instaladora realice un estudio previo para identificar el lugar en el que la incidencia del sol garantice el mayor rendimiento posible, ya que tanto la orientación como la inclinación son vitales en este sentido. No sirve de nada gastarse el dinero si luego no puedes rentabilizar la inversión todo lo que podrías.

2. ¿Qué potencia de placas solares necesito en mi casa?

La potencia de las instalaciones fotovoltaicas se mide en kilovatios-pico (kWp). Esta unidad de medida indica la potencia máxima que la instalación puede alcanzar.

Una vez sabido esto, y en función del consumo de electricidad de la vivienda, la empresa instaladora estimará la potencia que necesitas para cubrir dichas necesidades. También es posible calcularlo mediante simuladores online.

Para una vivienda unifamiliar de tamaño estándar en la que vive una familia de 4 a 6 personas, la potencia habitual de instalación oscila entre los 3 y los 5 kWp. No obstante, de ello dependen las circunstancias personales y hábitos de cada familia.

3. ¿Cuánto duran las placas solares?

Las placas solares de última generación se ofrecen con al menos 20 años de garantía de rendimiento energético de un 85%, momento a partir del cual comienzan a perder capacidad de producción.

Eso no significa que haya que cambiarlas, sino que la energía que producen disminuye en mayor medida según avanzan los años. De hecho, diversos estudios indican que un panel solar fotovoltaico puede considerarse funcional incluso durante 40 años.

4. ¿Cuánto influye la calidad del material?

Es bastante importante, pues hablamos de una gran inversión que será más rentable cuanto mejores materiales se utilicen. Debes saber que existen dos grandes tipos de paneles solares: monocristalino y policristalino.

El panel monocristalino es más eficiente, por lo que es capaz de producir más energía. En cambio, el policristalino es más barato y también más resistente al sobrecalentamiento.

Según los expertos, se recomienda la instalación de placas solares monocristalinas en climas fríos con tendencias a tormentas o niebla, ya que este tipo tiende a absorber mejor la radiación y soporta menos el sobrecalentamiento. En cambio, se recomienda la instalación de placas solares policristalinas en climas cálidos, pues absorben el calor a una mayor velocidad y les afecta en menor medida el sobrecalentamiento.

Otro elemento vital en una instalación fotovoltaica es el inversor. Es importante que sea de calidad y también que sea capaz de soportar más potencia de la inicialmente instalada, pues en un futuro quizá quieras ampliar y si el inversor no acompaña ese incremento de potencia tendrás que cambiarlo por uno nuevo.

En cualquier caso, busca una empresa instaladora de confianza y profesionalidad contrastada y déjate aconsejar.

4 mitos falsos sobre las placas solares

Ya hemos hablado de las cuatro claves a tener en cuenta antes de afrontar una instalación fotovoltaica. Ahora vamos a hablar de determinados mitos que juegan en contra de este tipo de energía y que son falsos.

1. Las placas solares son demasiado caras

Cierto es que acometer la instalación de placas solares obliga a un desembolso importante. Sin embargo, los precios han bajado mucho en los últimos años y la rentabilidad que ofrecen es bastante alta.

Actualmente, una instalación fotovoltaica de 3 kW tiene un precio aproximado de 5000 euros con todo incluido: placas, material, mano de obra, estructura, inversor y cableado. Y sin descontar las ayudas que todas las comunidades autónomas ofrecen en la actualidad para este tipo de instalaciones renovables.

2. Las placas solares no producen en días nublados o en invierno

Esto es rotundamente falso, porque en realidad los paneles solares producen energía a partir de la luz ambiental, no necesariamente de la incidencia directa de los rayos del sol.

Por tanto, una instalación fotovoltaica produce energía durante todo el año y durante las horas del día, obviamente no por la noche (aunque se están produciendo avances en ese campo).

Pide varios presupuestos y compara el precio, pero también la calidad de los materiales, especialmente las placas solares y el inversor.

De hecho, la eficiencia de un panel solar no es mayor cuanto más sol o calor haya, pues se puede producir un sobrecalentamiento que reduzca la eficiencia energética. Digamos que un día ideal para un panel solar es uno despejado con no más de 30 ºC de temperatura.

En cualquier caso, insistimos en que en los días nublados y de invierno también se produce energía, aunque mucha menos.

3. Los paneles solares sólo se pueden poner en viviendas unifamiliares

No es cierto, también pueden colocarse en edificios comunitarios e incluso existen en la actualidad cooperativas energéticas que permiten disfrutar de energía solar en emplazamientos alejados del punto de instalación.

En cualquier caso, debes saber que la Ley de Propiedad Horizontal permite instalar paneles solares en edificios comunitarios. Eso sí, debes contar con la aprobación de la comunidad de vecinos.

4. Los paneles solares contaminan, emiten radiación y se incendian

Es cierto que la producción de un panel solar contamina, pues además son necesarios materiales costosos como el silicio, la plata y el cobre. En cualquier caso, dicha contaminación es mucho más baja de lo que se dice y diversos estudios indican que el tiempo de amortización de energía y emisiones de un panel fotovoltaico oscila entre 1,6 y 2,1 años, dependiendo del tipo de panel elegido.

Lo que es rotundamente falso es que los paneles solares emitan radiaciones nocivas para la salud. Los campos magnéticos de corriente alterna formados en los paneles, el generador y el inversor son tan pequeños que ni siquiera alcanzan la intensidad de fuentes de alimentación de los ordenadores portátiles, por ejemplo.

Tampoco es cierto que una instalación fotovoltaica sea propensa al incendio. De hecho, las estadísticas en este sentido indican un reducidísimo 0,006% de sistemas instalados incendiados, todos ellos por defecto de montaje.

Esperamos haberte ayudado a tomar la decisión. Placas solares en casa, ¿sí o no?

Fuente: Forococheselectricos.com