La estrategia Doble E en Porsche: así se moverán sus deportivos en el futuro
¿Cómo serán los deportivos de Porsche en los próximos años? Todo el mundo apuesta por la electrificación, igual que la marca alemana, pero su apuesta por los e-fuels es también firme. De ahí la Doble E.
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Publicado: 04/04/2023 10:30
Las cosas no van nada mal en Porsche. En 2022 lograron unos resultados económicos muy positivos, con ingresos de récord. Su presente está más que asegurado y, además, con el último anuncio desde Europa que da una nueva vida a los motores de combustión con los e-fuels, se garantiza el futuro de sus deportivos más emblemáticos.
Si hablamos de futuro de la marca, no se puede dejar de lado la electrificación. Porsche pertenece al Grupo Volkswagen y el propio gigante automovilístico alemán tiene bien claro que irá de la mano de los eléctricos en todas sus marca.
A día de hoy, la gama Porsche cuenta solo con un vehículo cien por cien eléctrico, el Taycan, y con dos SUV híbridos enchufables, los Cayenne y Panamera E-Hybrid. El Macan eléctrico puro ya está en desarrollo y hace poco se dejó ver su interior. También habrá un 718 Boxster E, un SUV de 7 plazas coronando la gama SUV, un renovado Cayenne… todos ellos, eléctricos.
El último Porsche en electrificarse será el 911, quien se beneficiará precisamente esta estrategia Doble E que ha tomado vida tras las presiones de Alemania para poder alargar la vida útil de los motores de combustión más allá de 2035. Todo ello, gracias a los combustibles sintéticos, algo en lo que Porsche ya ha invertido mucho dinero.
Desde la marca alemana tienen claro que, además de la sostenibilidad, no pueden dejar apartado el concepto de rendimiento y la importancia de la prestaciones.
La Doble E en Porsche
«Un enfoque integral para la protección del clima». Así ven Porsche el futuro del automóvil. Por un lado, con una clara apuesta por el eléctrico: en 2025, pretenden que la mitad de sus coches sean eléctricos, un porcentaje que debería llegar al 80 por ciento en 2030.
Por el momento, la marca germana ha vendido más de 100.000 unidades de vehículos eléctricos puros en apenas tres años; es decir, del Taycan. Para sus eléctricos del futuro, Porsche ya se ha asegurado hacerse con la participación mayoritaria del grupo Cellforce para la fabricación de baterías de alto rendimiento.
También trabaja para ofrecer sus propios centros de recarga, con potencias de carga para sus coches de hasta 270 kW, así como en dos nuevos plataformas específicas: PPE (Plataforma Eléctrica Premium) y SSP (Plataforma de Sistemas Escalables).
«En Porsche no estamos interesados en batir récords de autonomía. Lo realmente importante es el tiempo de viaje, la cantidad de energía que puede almacenar una batería, más lo es aún la capacidad de carga», asegura Otmar Bitsche, ingeniero de Porsche.
El papel de los e-fuels
Los combustibles sintéticos forman la segunda pata de la estrategia Doble E. La marca alemana lleva trabajando en un e-fuel específico desde hace tres años, con la planta Haru Oni en Chile, en plena Patagonia, junto a socios como Siemens Energy, Enel o ExxonMobil.
Allí, el agua y el aire son papel fundamental para transformar y conseguir una gasolina sintética gracias a la acción de la energía eólica renovable, un proceso «potencialmente cerca de la neutralidad de carbono», según Porsche.
El sistema de electrolisis que realizan en estas instalaciones separa el hidrógeno del agua y, en combinación con CO2, se consigue producir metanol sintético y luego gasolina.
«La fase piloto está en marcha. Es probable que a mediados de década ya estemos produciendo más de 50 millones de litros anuales», comenta Barbara Frenkel, miembro del Consejo de Dirección de Porsche AG.
«En el mundo hay más de 1.300 millones de vehículos con motor de combustión interna. Los e-fuels son un complemento razonable a la electromovilidad», remata Frenkel.
Fotos: Porsche