Mercedes Clase S

La Clase S es el pináculo de la gama Mercedes. La máxima expresión de lujo, confort y tecnología. Desde el año 1972 esta denominación comercial se ha ganado el derecho a ser un estandarte, un buque insignia de lo que el fabricante alemán es capaz de hacer. Por ello, en muchas ocasiones, cuando se habla del Clase S, se suele omitir el nombre de Mercedes-Benz. Es algo que se ha logrado a base de estilo, confort y sobretodo, mucho lujo y tecnología. El Mercedes Clase S es el rival a batir dentro y fuera de Europa.

Tiene a sus espaldas siete generaciones y más de medio siglo de historia. Ahora bien, hubo otros modelos que precedieron al Clase S que conocemos en la actualidad. Desde la década de 1950 la compañía de la estrella ha comercializado toda una serie de sedanes de lujo como puedan ser el Ponton o el Fintail. Nombres informales con los que se conocía popularmente, entre otros, al Mercedes-Benz 220.

Como bien hemos señalado previamente, fue en 1972 cuando tuvo lugar la puesta de largo del Mercedes W116, el primer modelo de la compañía en llamarse oficialmente Clase S. Un modelo cuya trayectoria llega hasta nuestros días. A lo largo de todos estos años la Clase S de Mercedes ha sufrido una importante evolución. Ahora bien, siempre se ha mantenido fiel a sus orígenes. Y esto es determinante puesto que gracias a ello se ha mantenido como el referente de su categoría. El líder del segmento F.

Desde su lanzamiento comercial, y teniendo en cuenta los registros del modelo 220, la Clase S acumula más de cuatro millones de unidades vendidas en todo el mundo. Europa, Estados Unidos y China son algunos de los principales mercados del automóvil más lujoso de la compañía alemana.

A lo largo de su extensa vida comercial la Clase S ha estado disponible en multitud de versiones y/o variantes. Hace unas cuantas generaciones que en la gama hay disponible una versión con batalla extendida que destaca por ofrecer un plus de confort y lujo a bordo de las plazas posteriores.

El Clase S es uno de los coches predilectos por las autoridades políticas, líderes mundiales y dirigentes de multinacionales. Es por ello que, desde hace más de una década, se comercializa el Mercedes Clase S-Guard. La variante especial blindada del Clase S.

No es la única «versión especial del Clase S que ha sido creada y/o comercializada. También cabe hacer una mención al modelo con el particular tratamiento de Mercedes-Maybach. La división de superlujo de Mercedes ha sustentado, durante mucho tiempo, su modelo de negocio sobre el Clase S. El Mercedes-Maybach Clase S es uno de los coches más lujosos y exclusivos que se pueden comprar a día de hoy.

Es un vehículo muy grande. El modelo con distancia entre ejes estándar, mide 5,18 metros de largo. Una longitud que le sitúa, como hemos señalado, en el segmento F. En su interior hay un total de cinco plazas. Ahora bien, también hay disponibles versiones con cuatro plazas que incluyen unos comodísimos asientos traseros individuales. El maletero cubica un volumen de carga de 540 litros. Una cifra que puede incrementar abatiendo los respaldos de los asientos posteriores.

Está encuadrado en un segmento especialmente elitista en el que un reducidísimo número de modelos lucha por el liderato. A pesar de la dura competencia, el sedán de Mercedes es, sin lugar a dudas, la referencia de la categoría. Entre los principales rivales del Mercedes Clase S se encuentran modelos como el Audi A8, el BMW Serie 7, el Lexus LS, el Porsche Panamera, el Tesla Model S y el Maserati Quattroporte.

La gama de motores del Mercedes Clase S ha sufrido importantes cambios con el paso del tiempo y, sobre todo, de las diferentes generaciones. Históricamente ha estado disponible con motores de gasolina y diésel. Ahora bien, desde hace más de una década, la Clase S de Mercedes está electrificada. Y a un nivel importante. Fue en el año 2009 cuando nació el primer Clase S híbrido. Una apuesta por la electrificación que se ha ido incrementando para responder a los cambios de tendencia que se han producido en los principales mercados europeos.

El Clase S que podemos encontrar actualmente en los concesionarios está disponible con motores de gasolina y diésel. Todos electrificados con tecnología híbrida ligera (MHEV) de 48 voltios. Además, hay varias versiones híbridas enchufables (PHEV). El rango de potencias abarca desde los 313 CV hasta los 802 CV. Independientemente del motor elegido nos encontraremos con una caja de cambios automática. Hay versiones de tracción trasera y de tracción integral 4MATIC.

La división deportiva Mercedes-AMG es la encargada de coronar la gama del Clase S con las versiones más exclusivas, más extremas y más radicales de este sedán de lujo. El Mercedes-AMG S 63 E Performance se sitúa en lo más alto de la oferta con 802 CV, tracción integral y la capacidad de circular en modo completamente eléctrico más de 30 kilómetros.

El Clase S con tecnología MHEV luce el distintivo ambiental ECO de la DGT (Dirección General de Tráfico) con todas las ventajas de movilidad que ello supone. En cuanto a las versiones PHEV, en su inmensa mayoría, traen consigo la etiqueta 0 Emisiones.

Es producido en territorio europeo. El Mercedes Clase S se fabrica en Alemania. En concreto, el proceso de producción en serie se lleva a cabo en unas instalaciones localizadas en Sindelfingen. Este modelo también se ensambla en otras partes del mundo como la India, Indonesia, Tailandia y Malasia.