El nuevo Mitsubishi Colt es la gran apuesta del fabricante japonés para rivalizar en la competida categoría de los utilitarios de segmento B. Mitsubishi rescata del olvido una icónica denominación comercial para bautizar a su nuevo subcompacto. Un modelo llamado a desempeñar un papel protagonista en los planes del fabricante japonés para abrirse camino en una categoría tan competida.
La denominación Colt
fue usada por Mitsubishi por primera vez en el año 1962. Se utilizó para bautizar a numerosas generaciones de vehículos que fueron clave en el proceso de expansión global de la compañía. En Europa irrumpió en el año 1978 y, tras seis generaciones a la venta, cosechó más de 1.2 millones de unidades vendidas. Además, durante un periodo de tiempo nada desdeñable, fue producido en territorio europeo.
El Colt regresa a la vida gracias a la alianza y/o sinergias que Mitsubishi mantiene con el Grupo Renault. Y es que recordemos que ambas compañías, junto a Nissan, forman la denominada «Alianza». Es un vehículo estrechamente ligado al Renault Clio. Comparten arquitectura, mecánicas, tecnología y numerosos componentes. Está sustentado por la plataforma CMF-B. Una plataforma que ha sido crucial para que Mitsubishi pudiera materializar los planes de electrificación que tenía para este modelo.
Como cabría esperar, el nuevo Colt es un modelo preparado para afrontar los nuevos tiempos que corren en Europa. Unos tiempos marcados por la electrificación, por la conectividad y por la automatización. Además, cabe señalar que el nuevo Colt es un modelo creado exclusivamente para el Viejo Continente. Solo será vendido dentro de las fronteras europeas.
En la gama Mitsubishi ostenta el papel de «hermano mayor» del Space Star. Un modelo que, por tamaño, se sitúa a medio camino entre el segmento A y el segmento B. El mercado de los utilitarios subcompactos es muy importante en Europa. Era necesario que Mitsubishi tuviera una clara presencia en el mismo.
Tiene un tamaño perfecto para lidiar con la gran ciudad. Mide 4,05 metros de largo. Una longitud que le encuadra, como bien hemos señalado, en el segmento B. En su espacioso interior hay un total de cinco plazas. El maletero cubica un volumen de carga de 391 litros. Una cifra que se puede incrementar hasta los 1.069 litros en caso de abatir los respaldos de los asientos posteriores.
Compite en una categoría donde la competencia es máxima. Debe enfrentarse a una larga lista de adversarios. Entre los principales rivales del Mitsubishi Colt se encuentran modelos como el Ford Fiesta, el SEAT Ibiza, el Volkswagen Polo, el Peugeot 208, el Opel Corsa, el Renault Clio y el Citroën C3.
La gama de motores del nuevo Colt está compuesta por tres motorizaciones. Todas son de gasolina y presentan una configuración de tracción delantera. El escalón de acceso está ocupado por un motor de 1.0 litros y tres cilindros. Desarrolla una potencia de 65 CV y 95 Nm de par máximo. Se combina con una caja de cambios manual de cinco velocidades. Un escalón por encima se encuentra un motor 1.0 turbo con tres cilindros. Alcanza los 90 CV y 160 Nm
de par máximo. Está conectado a una transmisión manual de seis relaciones.
También hay disponible una interesantísima versión híbrida autorrecargable (HEV). Una mecánica que arroja una potencia total de 145 CV y que, gracias a una batería de iones de litio de 1,2 kWh, permite al Colt híbrido circular en modo 100% eléctrico durante un periodo de tiempo determinado y en situaciones específicas. Al tratarse de un coche híbrido luce el distintivo ambiental ECO de la DGT (Dirección General de Tráfico) con todas las ventajas de movilidad que ello supone.
El nuevo Mitsubishi Colt se fabrica en Turquía. Y más concretamente en unas instalaciones del Grupo Renault localizadas en Bursa. Se trata de la misma factoría en la que se produce el mencionado Clio.