Consejos5 propósitos de enmienda al volante para 2015

Para el nuevo año, Motor.es ha preparado unos propósitos de enmienda específicos para mejorar los hábitos al volante, ya que si uno se para a pensar en las pequeñas manías que tiene, seguro que entiende que parte de su seguridad se lo está prestando al azar.

1) No chatear al volante. Gracias a la evolución de los canales de comunicación y de la tecnología, chatear es casi más habitual que hablar por teléfono. Al menos con nuestros contactos personales. La exigencia de este canal y la información que se puede obtener de los momentos de conexión o de si un mensaje ha sido visualizado por el receptor, crean necesidades irrelevantes y estrés que se traduce muchas veces en desenfundar el móvil al volante.

Esto significa perder la vista de la carretera y pasar a segundo plano la información de la vía. Sin embargo, no hay mensaje que sea realmente de vida o muerte y es una práctica que debe detenerse inmediatamente e incluso castigarse con una abundante retirada de puntos, sanciones económicas duras o en ciertos casos, retirada del permiso.

Chatear es una de las nuevas prácticas más peligrosas al volante. | Fuente

2) No conducir con hora de llegada. Es prácticamente imposible que esto no ocurra a diario en la vida de la gente, pero es una práctica muy poco recomendable porque genera situaciones en las que reduces la distancia de seguridad, cambias de carril sin apenas mirar, aceleras mucho en espacios pequeños, tocas el claxon en innumerables ocasiones, pasas semáforos en ámbar y de vez en cuando atiendes al móvil en mitad de esta jungla de irresponsabilidades.

El tiempo escaso suele ser el peor enemigo del conductor. Proponte planificarte con más tiempo o no agobiarte si no llegas en hora. Todo el mundo entenderá que al volante no querías llegar saltándote todos los semáforos.

La hora de llegada es un momento de mucho estrés al volante. | Fuente

3) No discutir en el coche. Es un lugar habitual de discusión por motivos evitables como discrepar en la ruta seleccionada, pelea de niños en las plazas traseras o criticar la forma de conducir del conductor. Todo ello genera en el conductor en concreto un estrés que a medida que aumenta, pierde la atención de la carretera para centrarse en el tema de la discusión. Sin embargo se debe minimizar este riesgo por el mismo motivo que en el caso anterior: porque puede causar un accidente.

4) Llevar el coche a revisión. Hay cierto desconocimiento de cuándo es el momento óptimo de llevar un coche al taller o de cuándo se deben sustituir unos neumáticos. Por ello, en caso de duda y de que hayan pasado más de 12 meses desde la última revisión, es importante llevarlo al taller. En algunos casos no se hace porque es un gasto económico y la percepción es de que el coche tiene aceite y de que no presenta una conducción extraña. Olvida todos los prejuicios y los clichés y gasta algo de dinero en tu seguridad.

Revisa tus neumáticos y el coche en general. | Fuente

5) Conduce más despacio. Si todavía sigues circulando por encima de los límites (muy por encima), por muy buen detector de radares que tengas, trata de cumplir con las normas de circulación. Ya no solo porque a medida que avanza el tiempo hay más tipos de radar (como los famosos helicópteros que sobrevuelan la capital), sino porque las posibilidades de riesgo son más altas. Y acentuamos este propósito de enmienda en el caso de las motos, por tener una relación peso/potencia menor y por tanto unas prestaciones donde en pocos segundos puedes ir muy rápido. Sobre dos ruedas y a mucha velocidad solo te caerás una vez.

Hay radares que no podrás evitar y es peligroso ir muy rápido. | Fuente

Seguro que para el nuevo año ya has seleccionado unos propósitos de enmienda ajenos al mundo del motor, pero no es mala idea escoger algunos de estos consejos para seguir garantizando la seguridad al volante.