El ABT RS3-R lleva a un explosivo límite al compacto más deportivo de Audi
Brutalidad en estado más puro. Así es la última creación de los de ABT Sportsline que elevan el nivel del Audi RS 3 Sportback hasta el del exclusivo ABT Audi RS3-R. El compacto más deportivo de los cuatro aros se hace con un paquete aerodinámico especial que lo convierte en un objeto de deseo y casi insuperable.
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Publicado: 08/07/2022 08:00
En la categoría de los deportivos, los lobos con piel de cordero abundan tanto que, en ocasiones, no se les considera una alternativa real hasta que no demuestran sus prestaciones. Para muchos es el caso del Audi RS 3 Sportback, su deportividad está fuera de toda duda, pero para muchos otros, no es tan agresiva como cabe esperarse de un modelo con 400 CV debajo del capó.
La pasada primavera, los de ABT Sportsline ya presentaron su primera propuesta para el Audi RS 3 Sportback, confiriendo una estética más agresiva y modificando la electrónica para aumentar el rendimiento. Un primer nivel que, por supuesto, importante pero que pasa desapercibido. Sin embargo, el especialista alemán en tuning se ha sacado un as de la manga con el exclusivo ABT Audi RS3-R, del que solamente se fabricarán 200 unidades y todas numeradas para que quede constancia de su nivel más único en los umbrales de las puertas con unos embellecedores con la leyenda «ABT RS3-R 1/200».
El ABT Audi RS3-R es una bestia que barre a los rivales
Por fuera, ya lo hace gracias al paquete de fibra de carbono visible con componentes desarrollados primando la eficiencia, y eficacia, aerodinámicas. Es el caso del spoiler en el labio delantero, que también luce el nombre propio de esta creación, los bigotes en los extremos del paragolpes delantero, las carcasas de los espejos retrovisores y el spoiler sobre el portón trasero. Además, las llantas de aleación son forjadas, de 20 pulgadas y pintadas en negro brillante, montadas en neumáticos de medida estándar para las cuatro ruedas de 245/30 R20.
Por dentro, ABT también ha dejado su sello con unos nuevos asientos deportivos cuya estructura base es de fibra de carbono a la vista, mostrando los emblemas del preparador y el de RS3-R, y sumando detalles especiales como la proyección del logo en el asfalto, las alfombrillas o el botón de arranque y parada del motor.
Bajo el capó se encuentra la unidad de control del motor «ABT Power R» y un nuevo intercooler, un par de complementos al A3 más deportivo con los que suma un extra de 100 CV al bloque de cinco cilindros y 2.5 litros TFSI, llegando a la barrera de los 500 CV, así como un par motor máximo de 600 Nm. Unas cifras que le permiten rebajar el tiempo de aceleración de cero a 100 km/h de 3,8 a 3,3 segundos. El colmo es un nuevo sistema de escape deportivo con cuatro tubos de 95 milímetros de diámetro que están fabricados en acero inoxidable y terminados en negro mate. Una verdadera bestia que no tiene rival a su altura a la vista.