ABT retoca la estética y las prestaciones del Audi RS Q3 Sportback
Primera vuelta de tuerca del Audi RS Q3 Sportback. El SUV compacto más deportivo de la marca alemana potencia su imagen con una nueva gama de accesorios, a la vez que también aumenta su rendimiento en prestaciones comparado con el modelo de Audi Sport, llegando a los 440 CV de potencia máxima.
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Publicado: 14/05/2020 19:00
Parece no haber límite en la cifras de potencia de los SUV compactos. Mucho menos cuando son preparadores como ABT Sportsline los que ponen su granito de arena más especial, por lo que el listón cada vez va escalando más. Es el caso del nuevo Audi RS Q3 Sportback, que acaba de pasar por las manos de este especialista.
Una propuesta discreta pero no menos llamativa que da un aire más deportivo al modelo puesto a punto por la división deportiva de Audi Sport. Y no solo en el plano estético, porque las prestaciones también aumentan generosamente comparado con el modelo de serie. En su línea, los de ABT dan una vuelta de tuerca al motor de cinco cilindros y 2.5 litros turbo de 400 CV de potencia máxima y 480 Nm de par motor, con una nueva unidad de control del motor.
El tope de la gama del Q3 Sportback desarrolla nada menos que 440 CV y 520 Nm. Un aumento en las especificaciones que también se traduce en las prestaciones, haciendo saltar el limitador electrónico de la velocidad máxima y marcando en 285 km/h, al igual que también en la aceleración de 0 a 100 km/h, con 4,3 segundos en el cronómetro a salida parada.
El alto rendimiento que ofrece el modelo de Audi también se ve reflejado en la estética, con unas nuevas llantas de aleación de 20 y 21 pulgadas. Cuatro diseños entre los que destacan uno de cinco radios con una amplia separación entre ellos, que están fabricadas en aluminio de alta resistencia y, en parte, recuerdan a las de Mercedes-AMG.
Estas nuevas llantas de aleación dejan ver el potente sistema de frenos, una de las cualidades de los modelos de alto rendimiento y más atractivas, con grandes discos de freno perforados y pinzas de color azul, además de presentarse con un acabado de diamante en los bordes y la estructura de los radios en negro. Un ejercicio de tuning tan simple que casi no se puede llamar así.