Accidentado test de Toyota y M-Sport en Barcelona

Juho Hänninen tuvo un golpe contra una piedra de gran tamaño, dañando la suspensión delantera izquierda del Toyota Yaris WRC. El Ford Fiesta RS WRC tuvo problemas de motor, diferencial, caja de cambios y además Ott Tänak también tuvo un pequeño toque.

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Publicado: 07/10/2016 20:30

Los test que han completado esta semana tanto Toyota Gazoo Racing como M-Sport en la provincia de Barcelona no serán recordados por ninguno de los dos equipos por su especial productividad. Tanto el equipo de Tommi Mäkinen como el preparador de Cumbria han tenido distintos problemas técnicos a lo largo de los días de test que han frenado el ritmo de trabajo sobre el nuevo Toyota Yaris WRC y también sobre el Ford Fiesta RS WRC, modelo que sin embargo ha presentado una gran evolución a nivel aerodinámico. Con todo, Motor.es ha sido testigo de las incidencias en ambas pruebas.

Toyota Gazoo Racing ha seguido probando sobre grava con el Toyota Yaris WRC, modelo que cada vez tiene menos novedades, aunque en esta ocasión estrenaba pequeños detalles aerodinámicos en su zaga. Hänninen ha sido el piloto encargado de ponerse a los mandos del coche y también protagonista del mayor percance del equipo ya que en una curva impactaba con una roca de gran tamaño que dañaba la suspensión delantera izquierda del Yaris WRC. Al margen de esta incidencia, el equipo de Tommi Mäkinen también tenía que detener su test para cambiar piezas puntuales, además de lidiar con la lluvia durante la jornada del jueves.

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Por su parte, mucho más caótico era el test de M-Sport. El equipo dirigido por Malcolm Wilson optaba por probar sobre asfalto, pero la realidad es que la imagen del Ford Fiesta RS WRC remolcado ha sido una constante. Aunque no deja de ser comprensible al tratarse de la primera sesión de test con la nueva especificación aerodinámica, lo cierto es que los parones en las pasadas por el tramo eran prolongados. Con todo, el Fiesta RS WRC ha mostrado una imagen mucho más radical con splitter, paragolpes, tomas de aire, pasos de rueda, alerón y difusor nuevos.

Entre los problemas que ha vivido M-Sport durante estos test en las carreteras de Barcelona podemos enumerar averías recurrentes de motor y en el diferencial a lo largo del miércoles, un problema en la caja de cambios que obligó a un parón de casi dos horas durante la jornada del jueves y un pequeño toque que obligó a tener parado al Ford Fiesta RS WRC durante dos horas en la mediodía del propio jueves. Este hecho terminó de lastrar los planes de M-Sport, Ott Tänak y Eric Camilli ya que cuando repararon el coche una fuerte tormenta impidió que el trabajo continuase con normalidad.

Fotos: Motor.es / Eric Alonso

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