Otro accidente del coche de Google y esta vez...sí ha sido culpa suya
El pasado 14 de febrero uno de los modelos de coche autónomo de Google montado sobre un Lexus durante uno de sus trayectos por la ciudad de Mountain View colisionó con un autobús del servicio de transporte público al girar en una intersección.
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Publicado: 01/03/2016 20:00
Debido a la nueva ley que regula la circulación de coches autónomos en el estado de California que permite realizar pruebas en entornos reales hace ya meses que las calles de algunas ciudades están siendo transitadas por estos vehículo. Una clausula de esta ley obliga a hacer público todos los informes de errores y accidentes provocados por estos coches por motivos de seguridad.
Según un informe del DMW (Departamentento de vehículos de motor) de California, el pasado 14 de febrero un coche autónomo de Google sufrió una leve colisión con un autobús urbano. No es la primera vez que un coche de Google se ve implicado en un accidente pero sí es la primera vez que es el coche el causante del accidente.
Como indica el informe el causante fue un Lexus RX450h, modelo que se usa para montar el prototipo de coche autónomo, propiedad de Google. El accidente tuvo lugar en la calle El Camino Real (de tres carriles) con la intersección de la calle Castro en la ciudad de Mountain View, donde se encuentra la sede del gigante de internet.
Por lo visto la situación fue que el coche estaba situado en el carril derecho con el fin de girar a la derecha en la siguiente intersección pero debido a un obstáculo en su carril que lo bloqueaba tuvo que cambiar al carril central. Tras dejar pasar varios vehículos antes de cambiar de carril, el vehículo intuyó que un autobús que se aproximaba por detrás le cedería el paso pero se equivocó en la predicción y acabó chocando su parte frontal izquierda con el lateral del autobús.
Debido a que el autobús circulaba a 25 km/h y el coche a 3 km/h el accidente no fue grave y no se presentaron heridos. El coche resultó dañado en la rueda izquierda frontal, retrovisor y sensores de proximidad del lado del conductor.
El piloto del coche declaró que pudo haber intervenido pero también pensaba que el autobús se detendrían para cederle el paso.
Mañana Google hará unas declaraciones respecto al accidente confirmando que el vehículo se equivocó en la predicción del comportamiento del autobús.