Alfa Romeo obliga a los dueños del 33 Stradale a "compartir" su belleza, costará lo mismo que un Chiron o un Tourbillon
Es un espectáculo lo mires por donde lo mires. Lo que estará haciendo el propietario del primer ejemplar entregado del exclusivo Alfa Romeo 33 Stradale. La marca ha cumplido su palabra llevando la primera unidad de esta creación a un adinerado italiano que, pronto, debería dejarse admirar por las calles y carreteras transalpinas.
Más de uno podría decir que Alfa Romeo ya formaba parte de la élite de las marcas más prestigiosas del mundo, y no le falta razón. Pero, la marca italiana también está a otro nivel desde hace mucho tiempo, aunque por momentos haga una pequeña incursión en el terreno de las marcas más selectas, de las que se diferencia por una cosa: los milaneses no ganarán dinero con el nuevo 33 Stradale.
La firma de Arese ha cumplido su compromiso con los únicos 33 propietarios que han adquirido el mismo número de ejemplares de un espectacular Alfa Romeo 33 Stradale que había acelerado su desarrollo en los últimos meses, llegando a hacer entrega de la primera unidad a su dueño. Un italiano que no quiere que se sepa nada de su identidad.
Alfa Romeo 33 Stradale, un superdeportivo para ser admirado
Quizás desee darse ese capricho el día que saque a la calle su nuevo Alfa Romeo 33 Stradale, porque no sólo se cansará de admirarlo en su garaje y deseará experimentar sensaciones, sino que está obligado a sacarlo y saber lo que transmite cualquiera de las dos opciones mecánicas: de combustión, con un impresionante motor V6 de 3.0 litros biturbo y nada menos que 620 CV de potencia máxima o eléctrico con 750 CV y 450 kilómetros de autonomía.
Tampoco se sabe cuál de las dos opciones ha escogido. El secreto en torno a este superdeportivo es máximo, del que tampoco han dado a conocer su precio pero del que se baraja que cuesta un millón de dólares «pelado», sea de combustión o eléctrico. Lo único que ha transmitido la marca italiana es que ninguno de los 33 ejemplares es idéntico y que todos han pasado por el exclusivo taller de personalización de Bottega, lo que significa que cada coche producido cuesta millones.
Como mucho, 5 ejemplares vendidos del 33 Stradale son eléctricos
Daniel Guzzafame es el jefe global de productos de Alfa Romeo, y este sí ha revelado algunos detalles interesantes como el hecho de que un 80 por ciento de la producción son de combustión, que se seleccionan los clientes y se niega un pedido cuando se saben los colores elegidos. No hay cabida para extravagancias, pero sí un par de detalles que llaman la atención: sólo se fabricará con volante a la izquierda, aunque su propietario sea de mercados especiales, o que no está homologado para Alemania...
El sueño de unos dirigentes que sólo ha servido para demostrar el potencial de una marca que estaba de capa caída pero que, a día de hoy, no tiene aún la estructura suficiente para embarcarse en la cruzada de los one-off. El desembolso dedicado al 33 Stradale ha debido ser cuantioso, se desconoce, nunca lo sabremos pero está claro que no les hará ganar dinero. Si Alfa Romeo no pierde, será un milagro.