Rally de MarruecosAlonso critica el roadbook: "Decepciona que la zanja no estuviera marcada"
El español tuvo que abandonar la tercera etapa del Rally de Marruecos tras romper la suspensión en una zanja no señalizada. Tres de los diez primeros coches en pasar por la zona sufrieron algún tipo de incidente en ese punto, pero Alonso y Coma esperan poder seguir en el rally.
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Publicado: 07/10/2019 19:30
No están siendo fáciles para Fernando Alonso sus primeros pasos en la alta competición del mundo de los raids, pues ha tenido problemas de algún tipo en casi todas las jornadas. En la Lichtenburg 400 del pasado mes de septiembre ya sufrió un vuelco y la rotura del parabrisas por el impacto contra un ave, mientras que en Marruecos las cosas no han ido mucho mejor por el momento.
El primer día fueron tres pinchazos y, aunque en la segunda jornada Alonso y Coma pudieron terminar sin problema alguno, este lunes la situación se ha agravado hasta el punto de no permitirles terminar la etapa.
En el kilómetro 75, Alonso y Coma han caído en una zanja no señalizada en el libro de ruta, rompiendo la suspensión delantera y piezas adyacentes. Debido a ello, han tenido que ser remolcados al campamento para que los mecánicos de Toyota intenten reparar el coche #314 a tiempo para formar parte de la cuarta etapa, pues en el Rally de Marruecos existe la posibilidad de reengancharse a la competición al día siguiente.
"Había una gran zanja que parecía haber sido hecha recientemente”, explicó Fernando Alonso a la prensa desplazada al raid que sirve como simulacro para el Dakar del próximo mes de enero. “Dañamos la suspensión y el coche. Por desgracia no pudimos repararlo y tuvimos que venir de vuelta (al campamento). Espero que los chicos puedan repararlo y poder salir mañana".
“Dañamos la suspensión y el coche. Por desgracia no pudimos repararlo"
Según el piloto español, la zanja no estaba marcada en el libro de ruta, lo que propició una situación bastante tensa para los primeros participantes en pasar por la zona. "No estaba marcado en el roadbook. Saltamos e impactamos fuerte, pero a veces va bien y otras, mal. Al aterrizar, paramos y revisamos el coche, pero cuando empezamos a desmontar la rueda el coche que venía por detrás dio tres vueltas de campana. A partir de ahí fuimos corriendo a cerrar un poco esa zona para que nadie pasara por allí y no hubiese más percances. Un poco de pena porque queríamos un día sin problemas", lamentó.
No cabe duda de que en los raids este tipo de situaciones son relativamente habituales, pero Alonso mostró su descontento y, eso sí, se mostró optimista de cara a iniciar la cuarta etapa del rally. "Así son las cosas en esta disciplina, parece, pero es algo decepcionante que no estuviera en el libro de ruta. Tener tres coches eliminados dentro del top 10 es un porcentaje demasiado alto con experiencia o sin ella. Probablemente podremos salir mañana. Están analizando la situación, pero las primeras evaluaciones parecen positivas y los mecánicos han dicho que es reparable. Al 99%, sí”, apuntó.
Ritmo tranquilo
A diferencia del inicio de la Lichtenburg 400, en la que comenzó mejorando los tiempos de su compañero en Toyota, Giniel de Villiers, Fernando Alonso ha decidido tomarse con calma el Rally de Marruecos para asegurarse de acumular toda la experiencia posible.
Sin embargo, ello no ha propiciado que haya quedado libre de problemas. "Seguramente nosotros podemos hacerlo mejor e ir más rápido, porque creo que caímos en el foso por ir despacio. Estoy yendo muy, muy despacio para acumular kilómetros. Me lo estoy tomando con una calma increíble y aún así creo que hoy había cosas de las que, con o sin experiencia, no nos íbamos a librar. Había cosas que no estaban del todo bien en la etapa de hoy", insistió.
De cara a próximas jornadas, Fernando Alonso espera seguir acumulando experiencia, razón por la cual no pudo evitar sentirse decepcionado al conocer que no podría continuar la tercera etapa hasta el final. “Hay que seguir añadiendo kilómetros y mejorar y este rally me está sirviendo para ver el ritmo. Cuando vimos que no se podía reparar y hablamos con el equipo y nos dijeron que nos venían a remolcar, un poco de desilusión lógica de no poder acabar el día, pero con ganas de que sea reparable y poder salir mañana y no acabar con ese sabor de boca", concluyó.
Fotos: Toyota Gazoo Racing