Análisis técnico: Ferrari FF
Realizamos un análisis detallado acerca de la tecnología y mecánica que acompaña al primer Ferrari en hacer uso de un sistema de tracción total, el FF. Tiene un motor V12 de 6,3 Litros de cubicaje con una potencia de 660 CV. Acelera de 0 a 100 Km/h en 3, 7 segundos.
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Publicado: 01/03/2014 18:00
A finales de la década pasada, la cúpula directiva de Ferrari buscaba desarrollar un sustituto para el FF, en el Salón del Automóvil de Ginebra 2011, Ferrari presentaba el primer modelo de la marca en utilizar un sistema de tracción total.
Un concepto revolucionario, criticado y amado a partes iguales. Nunca antes habíamos visto un modelo del Cavallino Rampante semejante. En Ferrari preferían el tamaño, el confort de marcha y la utilidad en el día a día por encima de la velocidad y las aceleraciones con las que siempre nos habían deleitado sus modelos.
El maletero, con una capacidad de 450 Litros, así como su interior eran dignos de grandes berlinas de representación, donde poder llevar cómodamente a cuatro ocupantes, sin descuidar las prestaciones de un superdeportivo. Un Ferrari es un Ferrari y nunca nos defraudará cuando pisemos el acelerador al máximo.
Mecánica
Los ingenieros de Ferrari desarrollaron un motor V12 de 6,3 Litros de cubicaje, inyección directa y una relación de compresión de 12,3:1. La bancada de los cilindros forman un ángulo de 65 grados mientras que el tamaño de cada pistón es de 94,0 mm y la carrera del cilindro cubre un recorrido de 75,2 mm.
El V12 desarrolla una potencia máxima de 660 caballos a 8.000 rpm, y un motor máximo de 683 Nm a 6.000 rpm con 500 Nm ya disponibles a solamente 1.000 rpm. Esto le asegura el rendimiento de un deportivo extremo, con una aceleración de 0 a 100 Km/h en 3,7 segundos y una velocidad máxima de 335 km/h.
La caja de cambios, automática de doble embrague, era de siete relaciones con levas tras el volante. Dispone de un sistema de salida rápida que la marca denominada Launch Control así como la posibilidad de apagar y encender el motor en las detenciones, reduciendo el consumo de carburante a 15,4 Litros/100 Km, es decir, un 25% que su predecesor.
Lo más destacable fue la llegada del sistema 4RM de tracción en las cuatro ruedas, exclusivo de Ferrari. Estructuralmente es un sistema de tracción trasera y caja de cambios en posición trasera, al que se ha añadido una caja de transferencia en el eje delantero, generando la fuerza directamente del cigüeñal. Esto ha permitido reducir en más de un 50% el peso del sistema respecto a un convencional.
El par motor es enviado a las ruedas traseras, si bien la unidad de transferencia de potencia (PTU) se encarga de transmitirlo cuando sea necesario en las ruedas delantera en su superficie de poco agarre a través de dos embragues multidisco. El FF distribuye de manera inteligente el par en cada una de las cuatro ruedas, gracias a la integración de todos los controles del vehículo dinámico (E-Diff, F1-Trac y PTU) en una única centralizada.
Carrocería y chasis
La carrocería y el chasis han sido fabricados en materiales ligeros como lo son el aluminio, la fibra de carbono o el magnesio.
En conjunto, el Ferrari FF homologa un peso de 1.960 Kg, distribuido en un 53% en la parte trasera del vehículo. La relación peso-potencia queda cifrada 2.7 kg/CV, estableciendo una nueva referencia en su segmento.
La suspensión, de paralelogramo deformable y resorte helicoidal en los dos ejes, va acompañada por una amortiguación adaptativa magnética de tercera generación denominada SCM3. En opción permite elevar el tren delantero para superar con mayor facilidad obstáculos en la carretera.
El equipo de frenos, desarrollado en conjunto entre Ferrari y Brembo, hace uso de discos carbocerámicos con unas medidas de 398 mm en las ruedas anteriores y 360 mm en el eje posterior. Según la marca, el FF puede detenerse desde 100 Km/h en 35 m.
