Arranque sin llave en el coche: cómo funciona la llave inteligente y posibles problemas
La tecnología en los vehículos ha eliminado algunas de las «tradiciones» o rutinas más habituales de los conductores. Abrir, cerrar y arrancar el coche ya no requieren de una llave convencional, sino que se puede realizar, dependiendo del modelo, de forma inalámbrica e incluso remota.
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Publicado: 20/02/2024 14:00
Un sistema de arranque sin llave o llave inteligente permite al conductor la apertura, cierre y arranque del vehículo sin necesidad de que este entre en contacto físico. La apertura y cierre se producen por proximidad, mientras que para encender el motor basta con apretar un botón.
Si estás dispuesto a comprar un coche nuevo, seguro que el fabricante te ofrece de serie o como opción el sistema llamado «keyless» o de llave inteligente. Cada marca utiliza un nombre diferente, pero el objetivo es el mismo: ofrecer un sistema más cómodo y práctico para acceder y arrancar el vehículo.
En el caso de que vayas a comprar un coche de segunda mano, quizás este tenga todavía la llave de toda la vida, con la que abrir, cerrar y arrancar el motor de la forma convencional. No obstante, esto cada vez es menos habitual.
Las llaves inteligentes son el presente y el futuro, estando disponibles en diferentes formatos. Aun así, esta tecnología todavía presenta algunos retos y problemas relacionados con la ciberseguridad.
Así funcionan las llaves inteligentes
Un sistema «keyless» consta de una llave electrónica que emite una señal de radiofrecuencia de corto alcance. Esta señal es captada por los receptores del vehículo, ubicados en los accesos y en el interior: es entonces cuando su centralita interpreta que el conductor está cerca y permite la apertura y el arranque del vehículo.
Gracias a esta tecnología, no será ni siquiera sacar la llave del bolsillo para abrir, cerrar o arrancar el vehículo. Para la apertura, en función del modelo, podría ser necesario tocar algún punto de las manillas de las puertas.
Es importante tener en cuenta que cada fabricante y cada modelo puede marcar diferencias en sus sistemas de arranque y apertura sin llave, por lo que será necesario conocerlo en detalle para saber su funcionamiento.
Por ejemplo, no todos los sistemas «keyless» permiten cerrar el vehículo cuando este detecta que la llave inteligente se aleja.
Tipos de llaves inteligentes
De la misma forma, cada modelo puede tener un formato de llave inteligente diferente. Los más habituales son estas dos:
- Mando/Llave inteligente: suele ser el más utilizado y mantiene un formato muy similar a las llaves de toda la vida.
- Tarjeta: la función es la misma, pero tiene forma de una tarjeta, con un tamaño más grande que el de una tarjeta de crédito.
Muchos fabricantes ofrecen también un sistema de llave inteligente a través de una app para el smartphone. Desde el móvil ya se puede abrir, cerrar y arrancar muchos coches gracias a un software desarrollado por la propia marca y gracias a la tecnología Bluetooth y WiFi.
El siguiente paso en la evolución de esta tecnología está basado en la biométrica: muy pronto, podremos entrar en el vehículo gracias a los sistemas de reconocimiento facial o de nuestra huella dactilar.
Problemas con las llaves inteligentes
Problemas de ciberseguridad
Desde su concepción, las llaves inteligentes han sido motivos de suspicacias en lo relativo a la ciberseguridad, ya que su manipulación por parte de hackers es muy común en todo el mundo.
Aunque la tecnología permite obtener sistemas de encriptación más seguros, y la reglamentación de la ONU y de la Unión Europea empujen a los fabricantes a desarrollar sistemas de gestión de ciberseguridad, todavía hay muchos temores a posibles hackeos.
Ya no solo en los sistemas «keyless», también en todo lo referente a los vehículos de última generación, que pueden ser atacados por ciberdelincuentes actuando sobre el motor, los frenos y, cómo decíamos, con las llaves inteligentes.
Las mejoras en el encriptado de las llaves, la adaptación a la tecnología móvil y a los datos biométricos son las mejores soluciones a corto plazo para hacer de las llaves inteligentes más seguras.
Problemas con los inhibidores
Otros problemas relacionados con esta tecnología tiene que ver con la imposibilidad de hacer su función por culpa de los inhibidores de radiofrecuencia, por ejemplo en entornos de comisarías o edificios estatales.
En estos casos, dependiendo también del modelo, el conductor deberá recurrir a una llave física que suele ir incorporada dentro de la llave inteligente, o bien pegar el mando o tarjeta a una zona del coche que permita la activación (parabrisas, botón de encendido, salpicadero, consola central, columna de dirección…).
Cuidado con los despistes
Por último, con esta tecnología es importante estar atentos a posibles despistes: si dejamos la llave fuera del coche pero cerca (por ejemplo, en el techo), podremos arrancar el motor. Pero luego, al detener el vehículo, si la llave ya no está ahí no podremos volver a arrancarlo.
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