Así ayudará a la seguridad de todos la conectividad 5G que llegará a las carreteras secundarias en España
Las carreteras convencionales españolas se preparan para la llegada en los próximos años de la conectividad 5G, una tecnología que ayudará a impulsar la idea del coche conectado y que mejorará el tráfico y la seguridad vial.
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Publicado: 18/05/2023 11:30
La conectividad 5G es ya una absoluta realidad y está aquí para cambiar para siempre la forma de comunicarnos no solo entre las personas, también con nuestro entorno. Esta red móvil de quinta generación nos permite estar conectados a todo y en el menor tiempo posible.
Esta conexión inalámbrica a Internet de alta velocidad trae múltiples ventajas: en lo que al mundo del automóvil se refiere, impulsará el concepto de coche conectado, con el coche autónomo y eléctrico también de fondo como parte de la revolución que ya estamos viviendo en la movilidad por carretera.
El 5G impulsará la comunicación entre los propios vehículos (V2V), pero también la comunicación entre los vehículos y la infraestructura (V2X).
Llevamos ya años hablando del 5G y de todas las aplicaciones que puede acaparar, pero que todavía vemos un poco lejos hasta que se estandarice de forma general. Y en esas están las carreteras españolas, a las que todavía les falta mucho camino por recorrer para alcanzar estas cotas de conectividad.
Las carreteras secundarias, con conectividad 5G por satélite
La implementación del 5G a las carreteras españolas es algo que todavía está pendiente. Las carreteras secundarias son un foco importante de tráfico en nuestro país y, tristemente, también de accidentes mortales.
En España, este tipo de vías representa el 54 por ciento de la red de carreteras, de ahí que cualquier medida que vaya encaminada a mejorar la seguridad será en beneficio de todos. Según Sumauto, las vías secundarias españolas podrán tener muy pronto cobertura al completo gracias a las conexiones 5G por satélite.
La tecnología pone el foco principal sobre aquellas carreteras donde ni siquiera la actual señal 4G no llega, como pueden ser vías remotas o en zonas de alta montaña.
Esto será posible, una vez que se desarrolle la infraestructura adecuada, gracias a los futuros nanosatélites de órbita terrestre baja (LEO). La startup española Sateliot contará próximamente con 64 de estos satélites en los próximos 18 meses para dar cobertura en tiempo real a cualquier vehículo conectado en cualquier lugar del planeta.
Claro que para que las posibilidades sean las máximas, el vehículo deberá contar con la tecnología necesaria. Según la consultora PwC, siete de cada diez vehículos nuevos que se vendan en todo el mundo en 2030 estarán conectados.
Y en este sentido, entendemos como coche conectado aquel que es capaz de comunicarse con otros vehículos y con la infraestructura viaria que le rodea.
Los beneficios del coche conectado
Más allá de los que reniegan de la tecnología 5G, lo cierto es que las ventajas que puede traer a la movilidad por carretera son enormes. Piensa solo en el sistema de llamada de emergencia eCall que llevan ya todos los coches nuevos en la actualidad: estos son capaces, según datos de Sernauto, de salvar 11.000 vidas y evitar 260.000 accidentes cada año.
De poder contar con una mayor cobertura 5G en las carreteras secundarias, donde más accidentes se producen, evitaríamos muchos de estos siniestros. Esta tecnología ayuda precisamente a geolocalizar el vehículo en tiempo real, pero también aportar información relevante de seguridad.
El 5G permitirá comunicarse con los semáforos, con los aparcamientos, con los puentes levadizos… Ayudará a avisar con antelación a los conductores de cualquier incidente o zona en obras que tenga por delante, de retenciones, de frenazos inesperados, inclemencias meteorológicas, etc.
Pero también, por ejemplo, puede avisar de los puntos de recarga disponibles para coches eléctricos y su estado real, ayudar para prevenir o recuperar coches robados, informar sobre el estado técnico de un vehículo que quieras comprar…
En definitiva, hacer del coche más inteligente y de la conducción algo más seguro, ayudando también a reducir los errores humanos.
«El coche conectado es todo un folio en blanco por escribir y cada actor del sector tiene su propia hoja. Ahora, decir que un coche es lento no lo será por lo que marque el velocímetro, sino por la latencia, el tiempo que se necesita para transferir datos", ha asegurad el director comercial de Sumauto, Fréderic Cantaert.
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