No todos los motores son iguales. Aston Martin define su futuro en dos claves a partir de la opinión de sus clientes
Las marcas de prestigio suelen hacer algo que el resto no hacen: preguntar a los clientes. Una táctica para saber qué camino seguir en sus futuros modelos y así satisfacer a los interesados. Aston Martin lo ha hecho y ha sacado una interesante conclusión: el rendimiento, la potencia y las prestaciones, no lo son todo pero con un importante matiz.
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Publicado: 27/05/2024 15:00
Los más anhelados superdeportivos del mercado fusionan dos cualidades clave: el lujo y las prestaciones. Las marcas de prestigio lo saben, de ahí que sus productos sean tan exclusivos y al alcance de muy pocos. Fabricantes como Bentley, Rolls-Royce, McLaren o Aston Martin consideran esencial encomiarse a los clientes y saber de su experiencia de conducción o lo que consideran mejorar de cara al futuro.
Una investigación interna que si otras marcas más comunes hiciesen, otro gallo les cantaría. Pero, dado que la movilidad está experimentando un período de transición marcado por los coches eléctricos, una categoría en la que solamente se han metido los de Goodwood y ninguno más de sus rivales, los de Aston Martin han decidido preguntar a sus clientes para trazar su estrategia de futuro, y las conclusiones no pueden ser más claras.
Un V8 o V12 tiene más caché que un V6, prestaciones aparte
Desde luego, los eléctricos no se encuentran entre los deseos de los clientes de la marca de Gaydon. Alex Long, jefe de estrategia de producto de la marca, ha podido analizar toda la información transmitida por sus clientes y el resultado es claramente abrumador: los clientes quieren prestaciones en abundancia y, sobre todo, motores de combustión tradicional pero no unos cualquiera que proporcionen un elevado rendimiento.
Long ha destacado que los clientes manifiestan «querer un sonido y un rugido real, quiero saber y decirle a la gente que está a mi alrededor si es un V8 o un V12, porque los motores V8 y V12 siempre han estado reservados para coches muy especiales e interesantes. Algo que los V6 en el segmento Premium a menudo no son». Unas declaraciones muy interesantes, porque ponen de relieve que Aston Martin no puede hacer uso de la filosofía downsizing o de la electrificación para sacar de un V6 el rendimiento de un V8.
Los clientes de Aston Martin no avalan la electrificación
Asistir gratuitamente a cómo la competencia más directa se apoya en otras tecnologías, como Ferrari que está apostando por los híbridos enchufables, les ha movido a interesarse por una cuestión clave para no perder la estela de los contrincantes. El cese en las ventas del Aston Martin DBX con motor de seis cilindros en China ha sido una decisión correcta. Hace poco tiempo que la marca confirmó vender únicamente el DBX 707 en todos los mercados, por lo que pedir el seis cilindros en línea electrificado a AMG está, por ahora, descartado de pleno.