Aston Martin y lo que hay detrás del 'Proyecto Rambo', un nuevo SUV todoterreno 4x4 anti Defender

La marca Aston Martin está más viva que nunca, y no lo decimos por sus planes con los coches eléctricos. Es más, la firma británica ha reconocido que esta última tecnología está sufriendo retrasos por la decreciente demanda en el mercado.

Desde Aston Martin seguirán apostando por los motores de combustión en el corto y medio plazo, con la tecnología híbrida como protagonista como «puente» hacia la electrificación plena, que todavía tardará en llegar. El primer modelo, por ejemplo, no se espera que llegue al mercado hasta el 2026.

Dentro de los 'planes térmicos' en la marca, estos están valorando muy seriamente meter la cabeza en un terreno completamente nuevo para ellos, el de los todoterrenos 4x4. Aston Martin pone el punto de mira en Defender, Mercedes Clase G y compañía. Esto es lo que se sabe hasta el momento.

Proyecto Rambo, un guiño al mítico Lambo LM002

Desde las islas británicas, Autocar comenta que Aston Martin está evaluando internamente propuestas de diseño para un «súper 4x4 resistente y de alta potencia», un modelo que aúne en una misma carrocería unas excelsas cualidades off-road, el rendimiento de un superdeportivo y, cómo no, detalles Premium a la altura.

No hay ninguna decisión tomada al respecto, pero hay dos factores que estarían animando a Aston Martin a lanzarse a la aventura con un vehículo que internamente se conoce como 'Proyecto Rambo'. Un nombre, por cierto, que hace un guiño al apodo que tuvo el Lamborghini LM002, un todoterreno 4x4 radical y exclusivo que los italianos comercializaron entre 1986 y 1993.

Volviendo al Aston Martin, lo cierto es que el éxito de ventas de su primer SUV, el DBX (ya es su modelo más vendido), podrían animar en buena manera a lanzarse a desarrollar un segundo vehículo con estas características, pero mucho más enfocado al mundo off-road, como por ejemplo el Defender de Land Rover.

Por otro lado, la renovación reciente del Mercedes Clase G serviría para espolear los ánimos de la marca británica, como claro ejemplo de la todavía popularidad de este concepto de 4x4 que, aunque posee ya versión cien por cien eléctrica, todavía apuesta por los motores de combustión.

El todoterreno de Aston Martin, con corazón AMG

Aston Martin, que solo se lanzaría a realizar este proyecto si ve un panorama de negocio sólido y real, lo haría quizás con una producción limitada para preservar su exclusividad. Desde Autocar hablan de fabricar únicamente 2.500 unidades.

El ser un vehículo de nicho empujaría a la marca británica, además, a tomar la misma plataforma que el DBX. La marca considera, con razón, que no merece la pena desarrollar una arquitectura específica para un modelo así, pudiendo ser fabricado además en la misma planta que el DBX, en St Athan.

La colaboración de Aston Martin y Mercedes, además, permitiría a este probable SUV todoterreno 4x4 a tomar la misma mecánica V8 de la firma germana, presente ya también en la versión AMG del que sería su futuro rival, el Clase G. Este motor, biturbo de 4,0 litros, desarrolla 577 CV y empuja al todoterreno alemán hasta los 100 km/h desde parado en 4,5 segundos.

Además, Mercedes-AMG ya combina este V8 con la tecnología eléctrica en las versiones híbridas enchufables de otros modelos como SL, Clase S o GT. No obstante, el DBX todavía no cuenta con su propia variante PHEV, solo con el motor V8 de gasolina y 551 CV de potencia.

Fuente: Autocar