Audi muestra sus avances en la conducción autónoma con un Audi Q2 a escala

La Conferencia y Taller sobre Sistemas de Procesamiento de Información Neuronal (NIPS, por sus siglas en inglés), es uno de los eventos especializados en inteligencia artificial más importantes de mundo. Y Audi ha mostrado por primera vez una interesante tecnología que desvela parte de los avances de la marca de los cuatro aros en el campo de la conducción autónoma.

Con un pequeño Audi Q2, así muestra el fabricante alemán de los cuatro aros sus avances en el campo de la conducción autónoma.

Celebrado del 5 al 10 de diciembre en Barcelona, Audi enseñará al público asistente cómo un coche puede desarrollar estrategias de aparcamiento inteligentes. Para ello usarán un pequeño Audi Q2 a escala. La marca también mostrará a los especialistas y profesionales de la materia información sobre los puestos de trabajo en campos innovadores que necesitarán cubrir en los próximos años.

El pequeño Audi Q2 de «juguete» que podemos ver en las imágenes que acompañan este artículo está dotado de un sistema de autoaprendizaje. Una tecnología que se presenta clave para los coches de conducción autónoma en un futuro. Por el momento, Audi será el único fabricante de automóviles que estará presente en la Conferencia NIPS. Y con el pequeño Q2 demostrará el proceso de «aparcamiento inteligente».

En un pequeño área que mide 3 x 3 metros, el coche busca y encuentra de forma autónoma una plaza de aparcamiento adecuada para después estacionarse él mismo en ella sin intervención del conductor. El Audi Q2 a escala está dotado de un sensor tecnológico que consiste en dos cámaras individuales orientadas hacia delante y hacia atrás que actúan en colaboración con diez sensores ultrasónicos situados en diversos puntos alrededor del vehículo.

El Audi Q2 a escala empleado por la marca para mostrar sus avances en esta tecnología, al detalle.

Todos estos componentes son controlados a través de un ordenador central que procesa todos los datos obtenidos a través de lascámaras y los sensores. De esta manera, el coche a escala determina primero su posición relativa respecto al espacio de aparcamiento. Una vez detecta la posición, calcula cómo puede conducir de forma segura al destino fijado para estacionarse. El vehículo maniobra, gira y se mueve hacia delante y hacia atrás dependiendo de la situación en la que se encuentre.

Aunque a priori pueda parecer una tecnología que no es novedosa e innovadora, la verdad es que lo más importante de este sistema que nos muestra Audi es que tiene la capacidad de aprender de los ensayos y errores cometidos. Gracias a ello, con el paso del tiempo el sistema se volverá más «inteligente y eficiente». El prototipo ha sido desarrollado por Audi Electronics Venture (AEV), una filial de Audi AG con sede en la ciudad alemana de Gaimersheim.

Por otra parte, Audi ha confirmado que utilizará por primera vez un software de «autoaprendizaje» en la nueva generación del Audi A8. El controlador central de ayuda al conductor, más conocido como «zFAS». La marca destaca que en el futuro del coche autónomo y conectado los sistemas e integración de inteligencias artificiales será algo prioritario.