Las baterías de estado sólido son la clave para dominar el coche eléctrico; esta es la estrategia de cada fabricante

El proceso de transición al coche eléctrico está en marcha. La industria del automóvil ha puesto a la movilidad sostenible en el punto de mira. Las baterías se han convertido en el componente clave que permitirá materializar la masificación a nivel global del vehículo eléctrico. En la actualidad las baterías de iones de litio son la tecnología predominante. Sin embargo, el futuro que se vislumbra en el horizonte es totalmente distinto.

Hace tiempo que las baterías de estado sólido se han posicionado como el elemento clave de la señalada transición a la movilidad eléctrica. Una tecnología que revolucionará el coche eléctrico tal y como lo conocemos. A pesar de que en los últimos tiempos están surgiendo nuevos tipos de baterías en las que, por ejemplo, se buscan alternativas al litio, los fabricantes siguen apostando por la tecnología de estado sólido.

La estrategia de los fabricantes de coches en baterías de estado sólido

Los colosos de la industria automotriz han puesto a trabajar toda su maquinaria con el objetivo de materializar, de una vez, las baterías de estado sólido. Unas baterías que ofrecerán una autonomía mayor, unos tiempos de carga menores y una vida útil más larga. Tres cuestiones que podemos calificar de determinantes y que están relacionadas con los factores que influyen en la actualidad a la hora de comprar un coche eléctrico nuevo.

Un claro ejemplo de la importancia que tiene para el público la autonomía a la hora de decantarse o no por un vehículo eléctrico, es que un fabricante de baterías tan importante como CATL ha desarrollado las nuevas baterías Qilin. Unas baterías que harán realidad los coches eléctricos con 1.000 kilómetros de autonomía. Pero, volviendo a las ansiadas baterías de estado sólido, ¿qué fabricantes de coches trabajan en ellas? Compañías de primer nivel tienen a equipos trabajo investigando y desarrollando este campo.

Mercedes, BMW, Stellantis, Toyota y Nissan, son algunos de los fabricantes de automóviles que se encuentran trabajando en el incipiente campo de las baterías de estado sólido. Entremos en detalle y hagamos un repaso a sus estrategias para descubrir, por ejemplo, cuándo tendrán listas sus baterías de estado sólido.

BMW

El fabricante alemán BMW se interesó por las baterías de estado sólido hace unos cuantos años. A finales del año 2017 la compañía estableció un importante acuerdo estratégico con Solid Power para trabajar conjuntamente en el desarrollo de una nueva generación de baterías de estado sólido que pudieran ser empleadas en coches eléctricos de producción en serie.

BMW y Solid Power fijaron el 2026 como uno de los posibles años en los que estas baterías deberían estar en disposición de asaltar el mercado. En el pasado 2021, BMW participó junto a Ford en una inyección de capital en Solid Power. La compañía con sede en Colorado (Estados Unidos) recibió 130 millones de dólares. Unos recursos necesarios para continuar con el desarrollo.

Ford

Ford es uno de los miembros que integran el grupo llamado «Big Three». Los grandes colosos de la industria automotriz americana. Ford ha puesto en marcha un ambicioso proceso de transición al vehículo eléctrico y en su gama ya hay disponibles tan relevantes como el Ford F-150 Lightning o el Ford Mustang Mach-E. La popular firma del óvalo azul también está destinando recursos a seguir investigando en el campo de las baterías de estado sólido.

Al igual que BMW, Ford también ha invertido en Solid Power, la compañía estadounidense que está desarrollando baterías de estado sólido. Unas baterías que deben estar listas, como muy pronto, en el año 2026.

General Motors

GM, que también forma parte del club de los Tres Grandes de Estados Unidos, ha apretado el acelerador de su proceso de electrificación. La tecnología Ultium es en estos momentos el pilar central sobre el que sustenta la ofensiva eléctrica que está llevando a cabo. Sin embargo, General Motors no quiere quedarse atrás en la particular carrera por las baterías de estado sólido.

En los últimos tiempos General Motors y Honda han estrechado lazo en el campo de los vehículos eléctricos. Trabajan conjuntamente en numerosos proyectos. Y no solo se trata de desarrollo de automóviles. Las baterías de estado sólido también han sido puestas en el punto de mira. Ambas compañías invertirán recursos económicos para trabajar conjuntamente en el desarrollo de este tipo de baterías.

Honda

La industria automotriz japonesa está consiguiendo importantes avances en el desarrollo de las baterías de estado sólido. Acabamos de comentar que Honda trabaja junto a GM en este campo. La marca nipona ha establecido el 2040 como el año en el que solo venderá coches eléctricos de batería. Y espera alcanzar la neutralidad de carbono para todos sus productos y actividades corporativas en el año 2050.

En estos ambiciosos objetivos las baterías de estado sólido serán clave. Si bien la alianza con General Motors le permite profundizar todavía más en este campo, Honda está realizando de manera paralela una investigación independiente. Las baterías de estado sólido que está desarrollando se ofrecerán en los coches eléctricos de nueva generación que la marca introducirá en los próximos años.

Mercedes

El pasado verano fue el momento elegido por Mercedes para introducir en sociedad su ambicioso plan estratégico de electrificación. Una hoja de ruta que incluye el lanzamiento de nuevos modelos, plataformas y, lo que es igualmente importante, nuevas baterías. La marca principal del Grupo Mercedes-Benz pondrá en marcha hasta 8 Gigafábricas de baterías para garantizarse el suministro de este componente clave para el vehículo eléctrico.

Mercedes ha confirmado que seguirá desarrollando e investigando en el terreno de las celdas de baterías con el objetivo de mejorar la tecnología existente. En el caso concreto de las baterías de estado sólido, la compañía alemana se ha decantado por establecer alianzas estratégicas. Mercedes ha firmado un acuerdo de colaboración con ProLogium para impulsar el desarrollo de estas baterías. Mercedes y ProLogium fijaron el 2022 como el año en el que debería estar operativa una planta que se encargará de la fabricación de las baterías de estado sólido.

Nissan

El fabricante japonés Nissan también trabaja en el desarrollo de baterías de estado sólido. Es más, la propia compañía ha señalado que revolucionará la movilidad eléctrica. Nissan forma parte, junto con el Grupo Renault y con Mitsubishi, de la llamada «Alianza». Las tres compañías establecieron hace tiempo una visión conjunta respecto a las baterías de estado sólido. Nissan es el fabricante que lidera el desarrollo de para la Alianza.

Nissan espera estar en disposición de producir en masa baterías de estado sólido para mediados del año 2028. Además, de cara a dicho año esperan seguir reduciendo los costes de la batería hasta en un 65%. Algo crucial para conseguir coches eléctricos baratos y con mucha autonomía.

Stellantis

El cuarto mayor fabricante de vehículos a nivel mundial también está interesado en las baterías de estado sólido. Stellantis celebró en el verano de 2021 el llamado «EV Day». Un importante evento en el que se presentó en sociedad el plan estratégico del grupo automovilístico para afrontar la transición al coche eléctrico. Entre otros anuncios se aseguró que Stellantis estaría en disposición de presentar su tecnología de baterías de estado sólido en el año 2026.

Tras unos meses de la celebración de dicho evento Stellantis anunció el establecimiento de un acuerdo de colaboración con Factorial para trabajar conjuntamente en el desarrollo de este tipo de baterías. Stellantis decidió invertir en la tecnología FEST de Factorial para poder llevarla a coches de calle.

Toyota

Uno de los grandes colosos de la industria automotriz global, Toyota, se encuentra entre los fabricantes que más han avanzado en el campo de las baterías de estado sólido. A finales de 2021 la compañía anunció una inversión global de más de 11.000 millones de euros. Una inversión que permitirá materializar sus baterías de estado sólido.

A diferencia de otros fabricantes, Toyota ha decidido que sus coches híbridos sean los primeros en utilizar estas baterías de estado sólido. Más adelante serán equipadas en coches 100% eléctricos. Esperan que el primer vehículo de producción en serie esté listo para el año 2025. Y por cierto, no solo la propia marca Toyota se beneficiará de este desarrollo, Lexus también usará estas baterías.

Volkswagen

En último lugar, aunque no por ello menos importante, toca hablar del Grupo Volkswagen. La compañía que en estos momentos lidera las ventas de coches eléctricos en Europa también ha movido ficha y conseguido importantes alianzas para no quedarse atrás en el desarrollo de las baterías que prometen cambiar la movilidad sostenible tal y como la conocemos en la actualidad.

El Grupo Volkswagen es el mayor accionista de la empresa estadounidense QuantumScape. En el verano de 2021 la compañía especializada en el desarrollo de baterías de estado sólido anunció el inicio de una nueva fase de pruebas que estaba siendo realizada con éxito. Esperan estar en disposición de iniciar la producción en serie de estas baterías en algún momento de 2024.