Las cuentas de Bentley siguen sin salir, terminará 2018 con números rojos
Bentley sigue con los mismos problemas que en la pasada mitad del año. La marca británica terminará 2018 con las cuentas en números rojos y una pequeña mejora en la caída de las ventas, estimada en un 12 por ciento. Una situación que ha obligado a Volkswagen a tomar cartas en el asunto con un plan de reestructuración urgente que permita volver al fabricante a la senda de los beneficios.
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Publicado: 09/11/2018 08:00
Nuevo Bentley Continental GT
La marca británica no sale de los números rojos. Aunque terminará el año con un nuevo récord de fabricación durante 2018, no se traducirá en números de color negro, sino que el rojo continuará siendo el dominante.
A mediados de agosto ya te adelantamos que las cuentas de Bentley estaban tiritando, con una significativa pérdida en el beneficio operativo después de impuestos que, durante los primeros seis meses del año, se situó en el 10,6 por ciento por unidad fabricada. Esto significa que la marca pierde casi 17.500 euros por coche fabricado.
Si el pasado mes de agosto, Volkswagen veía el futuro de la marca británica como un auténtico problema pero del que se podía recuperar parcialmente y reducir este porcentaje en la medida de lo posible, a poco menos de un mes para terminar el año el porcentaje del EBIT sigue instaurado en el diez por ciento, y eso que el fabricante terminará el año con un nuevo récord de fabricación estimado en unas 11.000 unidades.
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El gigante alemán ya tiene asumido que necesita una reestructuración urgente de la marca, habiendo encargado al responsable al frente de Bentley el diseño de un plan para que sea implantado desde el mismo 1 de enero de 2019. No quiere dilatar una situación en el tiempo que puede tener consecuencias más graves, aunque los expertos de la marca alemana pondrán su toque especial si el nuevo plan de reestructuración no es totalmente de su agrado.
En Bentley asumen que una caída en las ventas de un 15 por ciento durante los primeros seis meses del año está fuera de lugar para una marca tan exclusiva como la que representan. Traducido este porcentaje a dinero contante y sonante, las pérdidas ascienden a 80 millones de euros solo en la primera mitad de 2018, al mismo tiempo que también señalan que acabarán el año con un 12 por ciento de caída.
Una muy pequeña recuperación que les hace respirar algo más, pero que claramente han señalado a un gran culpable detrás de esta situación, el nuevo ciclo de emisiones WLTP, para el que ha sido necesaria una elevada inversión que permita que todos los modelos de la gama cumplan con la nueva normativa.
