Por qué es una buena noticia que BMW abogue por impulsar el coche de hidrógeno

No todos los fabricantes han decidido apostarlo todo al coche eléctrico de batería. Grandes colosos de la industria del automóvil han decidido apostar por otras opciones como alternativa a la movilidad totalmente eléctrica. BMW es un claro ejemplo de estos movimientos que se están produciendo. La marca alemana ha puesto en su punto de mira la tecnología de pila de combustible de hidrógeno.

BMW no es la única compañía que ve con buenos ojos el hidrógeno. Y más concretamente la pila de combustible de hidrógeno. El futuro que comienza a dibujarse en el horizonte no tiene que estar monopolizado por una única tecnología. Pueden convivir más opciones. Es por ello que una marca como BMW decida destinar recursos al impulso del coche de hidrógeno es una extraordinaria noticia desde el punto de vista del consumidor. Cuantas más tecnologías convivan en el mercado más variada será la oferta a la hora de comprar un coche.

La necesidad de expandir la infraestructura de repostaje de hidrógeno

Antes de que el coche de hidrógeno se convierta en una opción viable para una parte importante de la población europea es necesario superar varios desafíos. El primero de ellos tiene que ver con el despliegue de una infraestructura de repostaje. Y es que, ¿de qué vale tener un coche de hidrógeno si no tienes dónde repostar? Es una situación un tanto paradójica, pero dicha cuestión se puede aplicar perfectamente al coche eléctrico de batería.

Oliver Zipse, CEO de BMW, es consciente de esta situación y en vistas de que la compañía sigue adelante explorando el mercado del coche de hidrógeno, aboga por expandir la infraestructura de repostaje. En el marco de la reciente conferencia por el Día de la Innovación en Erlangen (Alemania), el máximo dirigente de la compañía compartió con los medios su postura sobre la situación actual que atraviesa dicha tecnología.

«El hidrógeno es la única materia prima que se puede producir y almacenar de manera sostenible», destacó Zipse apenas unas semanas después de que BMW iniciara la producción de pilas de combustible de hidrógeno en Múnich. Unas pilas de combustible que serán equipadas en el BMW iX5 Hydrogen.

También señaló las ventajas del hidrógeno sobre el vehículo eléctrico: «No necesitas tu propia infraestructura de carga. Puedes convertir una estación de servicio en dos días. El camino es relativamente corto, a diferencia de la movilidad eléctrica, donde necesitas conexiones a la red eléctrica y necesitas una infraestructura de carga para cada automóvil».

BMW mantiene su compromiso con el coche eléctrico

El hecho de que BMW ya esté fabricando pilas de combustible de hidrógeno no quiere decir que haya dejado a un lado su ofensiva 100% eléctrica. La compañía mantiene intacto su compromiso con el coche eléctrico de batería. No solo se encuentra trabajando en una nueva generación de modelos eléctricos, también está desarrollando baterías que ofrecen mayor autonomía y está ultimando los detalles de la nueva plataforma Neue Klasse que sustentará, entre otros, al futuro BMW Serie 3 eléctrico.