BMW Individual, el sueño de ser único y especial
Individual, la palabra lo dice todo. Es el rango más alto de exclusividad dentro de BMW. La clase más alta a la que aspirar, donde la imaginación, o el presupuesto, fijan los límites de una personalización propia, al gusto del consumidor.
5 min. lectura
Publicado: 08/06/2016 14:00
Más de 20 años de experiencia a sus espaldas. Puede no parecer mucho tiempo, pero en esas más de dos décadas BMW Individual ha conseguido que la clase y el lujo habitual de la marca alemana queden un paso atrás. Es el lujo por el lujo, lo exclusivo por lo exclusivo. Una sección creada para ser único.
La sección Individual nació como un pequeño reducto de libertad creativa, una meta aspiracional en realidad. Algo que todo cliente busca pero que desgraciadamente queda lejos de la mayoría de bolsillos. Por ello BMW dividió la sección en dos. Por un lado tenemos a BMW Individual Collection, y por otro a BMW Individual Manufaktur.
El primero permite a los clientes elegir entre una gama predefinida de llantas, colores, tapicerías, volantes y molduras. Una manera de hacer cada BMW diferente al de serie. Pero si queremos exclusividad y personalización es en la sección Manufaktur en la que debemos poner nuestros ojos, pues son ellos los que nos llevarán a otro nivel.
Es la viva imagen de lo particular, de lo único. Ofrece la posibilidad de que cada cliente se encargue de la fabricación de su BMW soñado, a medida, sin ninguna restricción. Será la imaginación la que ponga los límites, pues infinitas son las posibilidades que los expertos de Individual ponen a nuestro alcance.
Desde el bordado de los asientos hasta la inserción de piedras preciosas. Desde el color de la carrocería hasta el tono de la piel o las molduras. Todo. Por supuesto no todo es personalización, sino que ésta también llega acompañada de los mejores materiales que se pueden comprar y disponer.
Las mejores pieles de las mejores reses del mundo. Seleccionadas a mano y con un extremo grado de exigencia. La más pequeña y minúscula picadura de un mosquito desecharía un retal. Lo mismo ocurre con las maderas. La más mínima imperfección en la veta provoca el rechazo. Es la máxima atención por el detalle, el mayor de los cuidados.
La pintura por su parte deja a ras de suelo los tradicionales acabados metalizados. Va más allá. Hay cuatro variantes, a cada cual más elaborada y compleja. Desde la mezcla de pintura con escamas de aluminio o mica, con efectos perlados, hasta las más complejas pinturas multi-capa y Frozen. Esta última permite, tras complejas mezclas, obtener un acabado mate aterciopelado, que exige los máximos cuidados.
Por muy triste que pueda parecer, BMW Individual no está disponible para todos los modelos. Solo los más altos de la casa tienen el lujo y el privilegio de poder recibir tales cuidados. Todos los M, salvo el nuevo M2, junto con el BMW Serie 7 son los únicos en acceder a la rama más particular de todas, Manufaktur. Por otro lado, a la sección Collection también pueden acceder los Serie 3 así como los X5 y X6.
Y es que BMW no olvida que en su ADN deportivo. Esa raza que lleva impresa también puede combinarse con la más alta exclusividad. Por ello la familia M no queda alejada de tales privilegios, como ya hemos dicho. Deportividad y personalización. El sueño más lejano de muchos, de la mayoría de nosotros.