Un responsable de BMW M en USA quita toda importancia al peso en los eléctricos
Hasta hace unos años, las altas prestaciones eran coto exclusivo de los modelos de gasolina, pero los eléctricos han demostrado que pueden serlos incluso más. Una cualidad que hasta ahora tenía en contra el factor del peso. Ahora, fuentes de BMW apuntan que esto no es una desventaja en su nueva generación de modelos de cero emisiones.
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Publicado: 04/12/2021 12:00
Colin Chapman, el fundador de Lotus, apuntaba que la potencia ofrecía unas prestaciones extremas en recta, pero que «si restabas peso, entonces serías muy rápido en cualquier circunstancia». Una máxima que todo los fabricantes conocen a la perfección, y que se ha convertido en una verdadera obsesión restando kilos a marchas forzadas en cada nueva generación de un modelo, especialmente los deportivos.
Eliminar 50 kilogramos de un modelo de producción de volumen es complicado, porque no basta con utilizar materiales ligeros, sino que llega un momento en el que hay que prescindir de equipamientos concretos. Una circunstancia en la que ya no es un problema para los coches eléctricos, que han demostrado sobradamente una capacidad de aceleración. Pero el peso extra de la batería sigue estando ahí, un lastre muy importante, al que John Kelly, el jefe de BMW M en Estados Unidos, le ha restado prácticamente toda la importancia. Para el máximo responsable, lo que antes era un auténtico problema, ahora resulta que no lo es en absoluto. Al menos, para el nuevo i4 M50, el peso extra no importa.
Declaraciones de BMW M en Estados Unidos señalan que el peso en los eléctricos no es un problema
Según éste, ya no supone un problema el peso, y mucho menos en un eléctrico como el BMW i4 M50. La nueva berlina eléctrica, que pesa en vacío 2.290 kilogramos, ofrece unas prestaciones de vértigo, es más potente que el propio M3 Berlina que pesa 1.855 kilogramos -concretamente con 34 CV más que el M Competition- pero los dos motores eléctricos, uno delante y otro detrás, contribuyen a equilibrar los pesos junto a la batería colocada entre los ejes que, además, rebaja el centro de gravedad.
Con una diferencia de 435 kilos entre ambas berlinas, el americano señala que esta casi media tonelada se compensa con la potencia que son capaces de ofrecer dos motores que pesan mucho menos de 200 kilos cada uno. Aún así, un peso tan elevado es un problema para los que buscan agilidad en tramos de curvas, algo que no puede ofrecer el alemán, y donde se verá superado. Las leyes de la física no se pueden superar, y por mucho que Kelly alabe las cualidades del nuevo i4, lo cierto es que su peso también tiene desventajas, comprometiendo la agilidad o el consumo.
Es indudable que el consumo de energía se ve afectado por el mayor peso del conjunto, lo cual invalida la tesis de Kelly de que el i4 no lleva el peso de un tanque lleno de combustible. Ciertamente no lleva un depósito cargado de gasolina, pero sí una batería de 400 kilos a cuestas y permanentemente, que no reduce el peso a la vez que se reduce la energía eléctrica.
Fuente: Autoforum.cz