El nuevo BMW M3 eléctrico se estrena en las pruebas de invierno en Suecia, +600 CV para derretir la nieve

Poco a poco van llegando a Suecia nuevos prototipos. Los de la casa de Múnich ya han hecho su primera aparición y por todo lo alto porque la marca deportiva ha llevado su último «juguete»: el BMW M3 eléctrico ha sido cazado en sus primeras fotos espía sobre las nevadas pistas de pruebas del inmenso complejo que el fabricante tiene en las grandes llanuras y lagos helados del Círculo Polar Ártico.

Es cierto que la marca alemana ya ha mostrado un adelanto del futuro M3, y que esta berlina deportiva de cero emisiones se ha presentado en el estos lares con el mismo camuflaje, pero estas primeras imágenes permiten echar un vistazo a algunos detalles que hasta ahora no se habían visto. Porque, aunque la apariencia diga que se trata de la carrocería de producción, en realidad no lo es tanto.

Fotos espía BMW M3 BEV 2027

Puedes ver que el parabrisas no termina de enrasar con los marcos, y eso tiene que ver también con los enormes pasos de rueda, más anchos y que no son los definitivos todavía, con los añadidos en los arcos que son más habituales en las mulas. Los frenos, eso sí, son dos enormes discos que ocupan todo el diámetro de las llantas de aleación y perforados en ambos ejes para disipar más rápidamente el calor.

Las manijas de las puertas enrasadas no son como las de «caja» que se han impuesto en la última hornada de modelos de BMW como el Serie 5 y compañía, presentando un novedoso quiebro en la tapa del puerto de carga de la batería, que sigue situada en lado derecho trasero. Sin embargo, hay un detalle que llama poderosamente la atención, el codo de las puertas traseras, que nada tiene que ver con el pliegue Hofmeister que aún está oculto en el pilar posterior.

La trasera casi muestra menos información gráfica que el resto de este futuro BMW M3 eléctrico, y que no te engañe la pantalla que se ve tras la ventanilla del pasajero. Esta es la del ordenador portátil que lleva el pasajero sobre su regazo con un mapa de navegación de la zona. El interior de esta berlina deportiva de altos vuelos ya se ha visto, un head-up display de nueva generación en la base del parabrisas.

Tan tecnológico como la compleja tecnología del chasis que aloja en su interior y que está ligada a la de propulsión, pues los cuatro motores con los que cuenta, uno por rueda, no sólo se ocupan de la propulsión sino también de la tracción, total o al eje trasero, según las circunstancias. BMW ha confirmado que también habrá un M3 de combustión, pero ni por asomo será tan rápido como este, que contará con una potencia máxima de entre 600 y 650 CV.

Tendremos que esperar hasta finales de 2026 para verlo bajo los grandes focos y hasta los primeros meses de 2027 en los concesionarios, pero su presencia en las pruebas de invierno nos invita a soñar y, lo reconocemos, nos gustaría verlo en acción sobre los lagos helados...