El coste de los eléctricos del grupo BMW obliga a MINI a recortar en personalización
La personalización es una de las claves en la marca británica. MINI ofrece una amplia gama de accesorios y decoraciones para el exterior e interior que hace únicos sus modelos. Sin embargo, BMW ha obligado a MINI a revisar su catálogo y recortar ampliamente la oferta, debido al elevado coste de la electrificación.
4 min. lectura
Publicado: 29/11/2021 20:00
La tecnología para la expansión de los coches eléctricos es cada vez más cara. Baterías, plataformas y motores eléctricos se llevan un grandísimo pico de los presupuestos de las marcas, especialmente las primeras. BMW es una de las que está realizando un gran esfuerzo económico y financiero, con tres marcas a las que pretende electrificar por todo lo alto, además de anunciar una estrategia de transformación que está prácticamente a la vuelta de la esquina.
En el caso de MINI, ya se ha anunciado que será una marca eléctrica a partir de 2030, pero la transformación progresiva empezará a mediados de la década, lo que supone el lanzamiento de nuevos modelos de cero emisiones. El problema principal es que los presupuestos generales, y los destinados a cada marca en especial, no pueden asumir las mismas dotaciones de fondos que se venían manteniendo hasta ahora. Y la personalización en MINI es una de las más perjudicadas, pues BMW ha obligado a los de Oxford a un generoso recorte de la oferta, y en la que ya están trabajando.
El recortado catálogo de personalización de MINI se estrenará en 2023
Por supuesto, no significa que la marca renuncie a esta opción que le reporta grandes ingresos. De hecho, MINI ya ha manifestado en más de una ocasión que no fabrica ni un solo modelo igual a otro, y que todos tienen un detalle que los hace ser diferentes, por nimios que sean. Lo que el fabricante de Reino Unido está haciendo es revisar el catálogo que ofrece y eliminar los que menor demanda tenga, o ninguna.
Nicolas Peter, Director financiero de BMW, lo ha dejado más que claro en unas declaraciones al diario «Financial Times», señalando que «Reduciremos especialmente el número de personalizaciones disponibles, porque ciertas combinaciones no tienen ningún sentido y nunca se eligen». Además, el gigante alemán también tiene intención de aumentar el margen de beneficio entre un 8 y un 10% de cada unidad vendida. Un objetivo más que ambicioso, teniendo en cuenta el tremendo desembolso que está haciendo en material de electrificación para ofrecer la más avanzada tecnología, prestaciones y, sobre todo, autonomía.
Esta nueva estrategia verá sus primeros frutos en 2023, cuando las nuevas generaciones de Hatch y del Countryman sean presentados. El utilitario y el SUV serán los primeros modelos en ver recortado el catálogo de personalización, en favor de una futura gama de eléctricos más que apasionante. La firma prepara una alternativa al Countryman que recuperará el nombre de la extinta variante coupé -el Paceman- un Hatch eléctrico y un inédito modelo bajo el nombre de Traveller.
Fuente: Financial Times