Los secretos aerodinámicos del Bugatti W16 Mistral, así es cómo vuela a más de 420 km/h sin techo
El nuevo Bugatti Tourbillon ya se ha presentado, pero la marca francesa tiene por delante otra misión antes de ponerse a fabricar el último hiperdeportivo. Las entregas del exclusivo Bugatti W16 Mistral, el roadster basado en el Chiron, están a punto de dar comienzo, dando cuenta ahora de exclusivos detalles que le permiten alcanzar más de 400 km/h.
4 min. lectura
Publicado: 25/10/2024 18:00
El desarrollo del esperado, para algunos, nuevo Bugatti W16 Mistral culminó el pasado verano con una puesta a punto específica para uno de los roadster más rápidos del planeta, a pesar de que gran parte de su genética es heredada del monstruoso Chiron. La marca de Molsheim ha paseado los prototipos de pre-producción del Mistral acumulando más kilómetros que cualquier otro modelo del fabricante en manos de sus clientes.
El hiperdeportivo francés es una obra de arte desde el ángulo desde el que se mire, y mucho más allá de su diseño. Las elegantes líneas no sólo son un deleite para los ojos, sino que son claves en una aerodinámica apoteósico para un modelo que supera los 420 km/h de velocidad punta, incluso sin techo. Un verdadero reto para los diseñadores, que se vieron obligados a buscar soluciones especiales para mantenerlo soldado al asfalto.
El Bugatti W16 Mistral desafía todos los límites aerodinámicos
La característica parrilla de herradura que preside el frontal de los Bugatti se ensanchó para llevar más aire hacia el radiador central y al imponente motor W16 de 1.600 CV y cuatro turbocompresores, como también se ha respetado la forma de «C» que se encuentra tras las puertas. En su interior, albergan unas tomas de aire que, una vez más, cuentan con un doble papel: el de la refrigeración del grupo motriz y el de aumentar la presión dinámica en el eje trasero.
La ausencia de techo fijo obligó a reforzar la estructura del parabrisas con una viga transversal que, además, se encarga de suavizar el flujo de aire a alta velocidad dirigiéndolo directamente hacia el brutal spoiler trasero, aumentando la sustentación.
La doble funcionalidad del aire en el Bugatti Mistral
Pero, lo que pocos saben es que el aire fresco que entra por las grandes tomas de aire del frontal y que se introduce a una elevada presión en el motor a través de los filtros de aire y con el que se consiguen tan magnas prestaciones, sale a a alta temperatura por las aberturas bajo las luces traseras en forma de «X».
Esta solución fue tomada del exclusivo Bolide, concibiendo un recorrido específico para que una dosis de este aire se divida hacia el difusor que, gracias a su diseño en forma de rampa, elimina rápidamente el aire caliente generado por el motor y la caja de cambios y aumenta la carga aerodinámica general. La tecnología más avanzada para menos de 100 clientes que han pagado, como mínimo, cinco millones de euros...
