BYD es el ojito derecho de China, un informe alemán revela las millonarias ayudas que recibe la marca frente a Geely y SAIC

Vaya por delante que es perfectamente lícito que los gobiernos ayuden a los fabricantes de coches, otra cosa muy diferente es que no sea ético hacerlo con el dinero de los impuestos recaudados a los ciudadanos. Podría ser comprensible si una marca se encuentra en una delicada situación financiera y al borde del abismo e inyectando capital para evitar su cierre, eso lo dejamos a tu opinión.

Pero sí es reprobable la estrategia de las marcas chinas para asentarse en el mercado europeo de coches eléctricos con importantes diferencias en los precios entre modelos equivalentes de la misma categoría y segmento. Hace unos meses que Bruselas envió a sus inspectores para estudiar a fondo las cuentas de los tres grandes productores de coches chinos, BYD, SAIC y Geely. Un trío que se puso a completa disposición de la Unión Europa, «sin nada que ocultar», para convencer a ésta de que no estaban recibiendo ayuda gubernamental alguna.

BYD recibe muchas más ayudas que cualquier otra marca china

Sin embargo, aunque las conclusiones del estudio se conocerán el próximo otoño, Bruselas tiene indicios de que las tres marcas no han dicho toda la verdad. El foco ahora se ha puesto sobre la primera tras conocerse la publicación de un exhaustivo informe elaborado por el Instituto Alemán de Economía Mundial de Kiel, en el que se apunta que BYD ha recibido hasta 3.400 millones de euros en subvenciones del gobierno asiático entre 2020 y 2024.

Hace cuatro años, los de Build Your Dreams se embolsaron, según el informe, nada menos que 220 millones de euros en ayudas directas, creciendo hasta 2.100 millones de euros dos años después. De ser cierto, se nota mucho que BYD es la marca preferida del gobierno chino, para el que las ayudas son algo normal siempre y cuando estén «dedicados a la inversión estratégica». Dicho de otra forma, para desarrollar tecnologías claves que reporten elevados beneficios.

Sin subvenciones, las marcas chinas no serían tan competitivas en Europa

Dirk Döhse, uno de los autores de este informe, ha señalado que «Las cifras subestiman claramente la verdadera escala y alcance de los subsidios a la tecnología verde en China. Sin la tecnología china subvencionada, los productos cruciales para la transformación verde de Alemania serían también más caros y escasos». El autor explica que el análisis realizado estima que las ayudas de China son entre tres y nueve veces más elevadas que los de otros países como Estados Unidos o Alemania, lo que permite a sus marcas, especialmente a BYD, escalar posiciones rápidamente en el mercado doméstico local y en el europeo, explotando al máximo su capacidad tecnológica y de producción.