¡BYD suelta la bomba en el Salón de Ginebra! Confirma conversaciones con Italia para una segunda fábrica de coches asestando un duro golpe a Stellantis

BYD no tiene límites. La marca china ha estado presente en la gran feria del Salón del Automóvil de Ginebra 2024, donde ha presentado las novedades que llegarán en los próximos meses a todos los rincones del continente europeo. Un nuevo aluvión de coches eléctricos pero también híbridos enchufables en una nueva estrategia por dominar el mercado en todos los segmentos y niveles posibles.

La firma, que ha acaparado una gran atención en el primer día dedicado a la prensa, también es noticia por las declaraciones que un alto cargo del fabricante chino ha realizado. Unas palabras de gran importancia que demuestran que BYD no tiene límites en sus objetivos más ambiciosos, y que siembran el pánico de verdad. El máximo responsable de Stellantis ya puede echarse a temblar a pesar de haberse manifestado en contra de las trabas que la Unión Europea estudia imponer a las marcas chinas.

BYD

Michael Shu, director general de la compañía china, ha confesado en una entrevista durante la gran feria suiza que el Gobierno italiano ha llamado a sus puertas para instalarse en su territorio. Y, por supuesto, no han hablado de concesionarios, sino de terrenos para albergar una fábrica de coches. Shu ha señalado que «Hemos tenido algunos contactos para discutirlo, pero tenemos que evaluar en función de nuestras ventas: estamos logrando avances extraordinarios en este momento».

BYD ya ha confirmado su primera gran planta de la producción en el continente europeo. Tras unas fracasadas conversaciones con Ford para adquirir la factoría alemana de Saarlouis, los chinos se han quedado con un inmenso terreno en Hungría donde construirá su primera sede de fabricación que permitirá esquivar los aranceles a la exportación así como también las sanciones de los diferentes países por su origen asiático. Italia busca potenciar su industria automotriz llamando a la puerta de uno de los grandes productores mundiales, especialmente cuando su relación con Stellantis no pasa por el mejor momento.

BYD no pide dinero, clave en la «excelente» relación con Italia

Un segundo centro de producción de BYD en Europa no se puede descartar en absoluto, y no es descabellado pensarlo. La firma quiere dominar el mercado y ahora, con un pequeño cambio de postura que pasa por ofrecer modelos con otras tecnologías y no limitarse estrictamente a los eléctricos, gana peso la idea. Para Italia, un punto a favor si logra su objetivo, teniendo en cuenta que estos no piden dinero, mientras que Stellantis ya ha lanzado varias piedras al tejado del Gobierno en esta línea. Si las relaciones ya estaban tensas, ahora lo estarán mucho más.