BYD presenta el eléctrico que todos necesitamos, pero que nadie nos ofrece, ¿la solución a todos los problemas?

China y Europa están inmersos en una guerra comercial como nunca antes habíamos visto. La nueva movilidad se ha convertido en el arma arrojadiza con el que Oriente asusta a Occidente. Mientras que en el Viejo Continente los conductores esperan una nueva generación de coches eléctricos, los clientes chinos disfrutan de vehículos muy atractivos. Modelos como la última versión del BYD Yuan Up. Un SUV compacto que de llegar a Europa sería todo un éxito de ventas.

Ya por el pasado mes de marzo el gigante BYD presentó en sociedad su enésimo lanzamiento eléctrico. Lanzado bajo la denominación Yuan Up, se trata de un SUV que en Europa estaría enclavado en la frontera de los segmentos B y C. Un nicho comercial muy importante por volumen de ventas. Recientemente hemos descubierto que BYD está preparando una variante europea del Yuan Up que será rebautizada como BYD Atto 2. Tendrá modificaciones importantes con respecto a su homólogo chino, pero sus claves principales serán las mismas.

El Yuan Up llegará a Europa con una gran relación calidad-precio

Sus medidas son realmente interesantes: 4,31 metros de largo, 1,83 metros de ancho y 1,67 metros de alto para una distancia entre ejes total de 2,62 metros y un volumen de maletero de hasta 1.320 litros. Entre sus rivales europeos cabe destacar al Peugeot E-2008, al Volkswagen ID.3 o al CUPRA Born. De puertas para dentro muestra un aspecto realmente tecnológico gracias a la presencia de dos pantallas digitales. La principal, situada en la consola central sirve como eje principal del sistema multimedia. Un panel de 10,1 pulgadas que integra elementos como las cámaras de aparcamiento, el navegador o la conectividad para dispositivos móviles.

El equipamiento es equiparable al de cualquier modelo producido en Europa, pero si por algo destaca el Yuan Up es por su precio y rendimiento eléctrico. Al basarse en la plataforma 3.0 típica de BYD es capaz de ofrecer diferentes configuraciones mecánicas. La nueva variante introducida ahora en China anima a ser positivos en Europa. La versión Vitality Edition incorpora un sólo motor de 94 caballos que genera 180 Nm de par motor. No es mucho, pero suficiente para un uso urbano e interurbano donde la autonomía resulta esencial. BYD registra un alcance máximo de 401 kilómetros mediante el ciclo de homologación CLTC.

Eso quiere decir que en Europa perderá algo de autonomía, aunque puede que la unidad muestre una configuración diferente para mejorar ese dato. La fuente de alimentación es una batería LFP de 45,12 kWh de capacidad que cuenta con la innovadora tecnología Cell-to-Body. La velocidad de carga es razonablemente buena, del 30 al 80% en, aproximadamente, 30 minutos. En líneas generales no estamos hablando del coche eléctrico definitivo por rendimiento, pero si tenemos en cuenta lo que vale está claro que el mayor argumento de compra es el precio.

En China, el Yuan Up ha vendido registrado más de 49.000 unidades matriculadas en apenas 4 meses a la venta. El rango de precios es muy atractivo, costando la versión más cara de todas 119.800 yuanes, unos 15.300 euros al cambio de moneda. La versión Vitality Edition se antoja la más recomendable por sus 401 kilómetros de autonomía y una tarifa básica de 99.800 yuanes, unos 12.800 euros. Son apenas 380 euros más que la unidad básica con 100 kilómetros menos de autonomía. Se espera que en Europa haga acto de presencia a mediados de 2025.