¿Se acabó la «barra libre» de etiquetas ECO en España? El Gobierno hará cambios

El Gobierno ha presentado el denominado plan de impulso de la cadena de valor de la industria de la automoción. Un ambicioso programa destinado a la reactivación y ayuda del sector del automóvil en España que se ha visto especialmente afectado por la crisis causada por la pandemia del coronavirus COVID-19. Una de las claves de dicho plan es que se incluyen nuevas ayudas directas para la compra de coches nuevos así como la puesta en marcha de una nueva edición del Plan MOVES.

En el extenso documento presentado por el Gobierno se incluye un apartado que merece toda nuestra atención, puesto que hace referencia al actual sistema de etiquetas medioambientales de la DGT (Dirección General de Tráfico). Un sistema que en la actualidad está compuesta por un total de cuatro categorías: C, B, ECO y 0 Emisiones. Ello ha permitido a las autoridades realizar una clasificación del parque de vehículos en base a sus niveles de emisiones.

Ahora bien, no es oro todo lo que reluce con respecto a esta forma de catalogar los vehículos que son matriculados puesto que desde que se puso en marcha se generaron diversas polémicas. Y es, por ejemplo, los requisitos para que un automóvil sea clasificado como ECO. Más concretamente hacemos referencia a los coches híbridos ligeros (Mild Hybrid).

Los automóviles equipados con un motor de combustión interna (gasolina o diésel) electrificado con un sistema híbrido ligero (Mild Hybrid) de 12 o 48 voltios son considerados como ECO por la DGT. Sin embargo, y aunque sean catalogados al mismo nivel que los híbridos convencionales, también denominados HEV, lo cierto es que no ofrecen las mismas capacidades. Por ejemplo, los híbridos ligeros no ofrecen autonomía en modo 100% eléctrico.

El sistema de etiquetas medioambientales de la DGT será revisado

Si bien por el momento no se puede afirmar que la «barra libre» de etiquetas ECO en España vaya a finalizar, sí se ha confirmado que la Dirección General de Tráfico va a establecer un grupo de trabajo interministerial que deberá valorar la necesidad de una actualización de las etiquetas medioambientales. Una actualización que deberá ser consensuada con el sector y con el resto de agentes involucrados y, en su caso, se elevará una propuesta en los próximos 6 meses.

El Gobierno hace referencia a la evolución tecnológica como el principal detonante de la puesta en marcha de este equipo de trabajo cuyo objetivo será analizar las posibilidades que ofrece el sistema de etiquetas actual para, o bien añadir nuevas etiquetas o actualizar los requisitos para conseguir las actuales.

Fuente: Moncloa