El pequeño Citroën C1 prepara su desembarco en China

El urbanita y desenfadado Citroën C1 llegará a los concesionarios chinos. Así lo demuestran estas fotos espía.

Elfuturo del Citroën C1 en Europa es muy negro. Tras saberse recientemente que el Grupo PSA y Toyota han decidido cancelar su acuerdo para la renovación de sus «trillizos» (Peugeot 108, Citroën C1 y Toyota Aygo) a partir del año 2021, la continuidad del utilitario francés de segmento A se encuentra en entredicho. Recordemos que ambas compañías venían trabajando conjuntamente desde el año 2002 para tener representación en dicho segmento. Sin embargo, los tiempos cambian.

Mientras que algunas informaciones apuntan que el Toyota Aygo puede ser sustituido por un pequeño SUV, en lo que atañe al Citroën C1 la cosa no está tan clara. Es más, teniendo en cuenta los pobres datos de ventas que está reportando en Europa, no es descabellado pensar que estamos ante un modelo que está tocado de muerte. O quizás no. La sorpresa nos llega desde el «gigante asiático».

En las fotos espía que acompañan este artículo nos encontramos a la futura versión china del Citroën C1. Así es, el pequeño y desenfadado urbanita de Citroën dará el salto a este importantísimo mercado con el objetivo de hacerse un hueco entre los conductores que buscan un utilitario de dimensiones comedidas para moverse por las abarrotadas urbes de China en las que el tráfico y la falta de aparcamiento es un problema a la orden del día.

Citroën está trabajando en la versión china del pequeño C1. Será presentada este año 2019.

Un medio chino especializado que se hace eco de estas dos instantáneas asegura que Citroën está ultimando los detalles para la puesta de largo del Citroën C1 en China, algo que ocurrirá previsiblemente (son rumores sin confirmar) en algún momento del tercer trimestre de 2019. A pesar del ligero camuflaje que luce la unidad de pruebas avistada, queda claro que se trata del C1.

Ahora bien, ¿qué hace pensar que el Citroën C1 puede triunfar o tener un éxito aceptable en China? Una de las bazas que puede jugar Citroën es la del diseño. A pesar de la estrecha relación que tiene con sus «primo hermanos», el Peugeot 108 y Toyota Aygo, el C1 luce un diseño muy diferenciado. Ello le permite derrochar personalidad propia dentro del segmento A del mercado automovilístico.

Durante el año 2018, que recientemente hemos dejado atrás, las ventas del Citroën C1 han alcanzado las 2.224 unidades (según datos de Anicam), una cifra que contrasta con las 20.801 matriculaciones cosechadas por el Citroën C3. Las ventas del Peugeot 108 fueron aún peores, ya que alcanzaron los 1.548 ejemplares matriculados en 2018. Por su parte, el Toyota Aygo cerró el año con 3.549 unidades vendidas.

Fuente: bitauto