Claves de la movilidad del futuro, las marcas responden

Para muchos, el futuro ya ha llegado y para otros no tanto. La evolución del mercado marca las pautas a seguir en los próximos años, especialmente estudiando el comportamiento de los clientes en determinadas materias: los SUV se han hecho con ellos, los eléctricos están empezando a llegar con más modelos y la movilidad compartida toma más terreno.

No es el caso de la conducción autónoma. La tecnología avanza pero cada vez más fabricantes ven que el nivel 5 -el máximo contemplado- no va a ser alcanzable tan fácilmente. Aún así ya ha llegado aunque en un nivel bajo. Nosotros hemos realizado cinco preguntas a los responsables de Nissan, Lexus, Kia, Toyota, Mercedes y Mazda, nos interesa conocer qué opinan de la situación actual.

Pero también lo que esperamos de ellos en el futuro. Saben que los clientes cada vez están más y mejor informados y la competitividad es máxima. Así, que a continuación te contamos lo que Marco Toro, Eduardo Divar, Leo Carluccio, Miguel Carsi, Roland Schell y José María Terol opinan del panorama actual y del futuro.

¿Los SUV eliminarán los demás segmentos del mercado?

Los seis coinciden en que "los SUV no han tocado techo y es difícilmente predecible si lo harán o no y cuándo, coincidiendo también en que las berlinas y turismos convencionales de los segmentos C y D no desaparecerán del mercado, dado que hay clientes que prefieren este tipo de modelo antes que ir en un modelo más alto, especialmente el cliente de flotas de empresa".

Las ventas en Europa de las berlinas han caído considerablemente pero se han estabilizado. Que se incremente y vuelvan a cifras de hace unos cinco años atrás será difícil, en parte porque los propios fabricantes son perfectos conocedores de que los SUV son el modelo demandado hoy día y ofrecer nuevas alternativas es una obligación para que la competencia no reste ventas, por lo que ninguna de las marcas que representan están dispuestas a renunciar a segmentos tradicionales, un movimiento lógico para ofrecer una gama completa adaptada a todos los clientes.

¿Cómo ven el futuro del coche eléctrico en España?

Los seis representantes coinciden en que "la electrificación total es el futuro pero a largo plazo. Hoy, los clientes son todavía reacios a moverse de la combustión a la electricidad, por lo que los híbridos y los híbridos enchufables son la forma más conveniente para una transición al eléctrico puro, coincidiendo que la combustión difícilmente pueda desaparecer".

Es cierto que muchas grandes capitales europeas han prohibido la entrada de modelos diésel al centro obligando a los conductores a dejar su vehículo en aparcamientos en el extrarradio, por lo que "los electrificados y los eléctricos, que no son lo mismo, son el futuro". Y las seis marcas a las que les hemos preguntado coinciden que las matrices están dedicando grandes partidas de inversión en este campo.

Pero los eléctricos tienen un límite y es la carga y la autonomía. Los dos son factores que, a día de hoy, son caros para el bolsillo del cliente y, además, el primero obliga a invertir más tiempo del que estamos acostumbrados para cargar las baterías. Por ello, para Toyota y Lexus es fundamental profundizar en el hidrógeno como combustible, la única solución que consideran y elimina estos problemas.

El éxito del coche eléctrico depende en gran medida de la infraestructura

En este apartado, los responsables consultados coinciden plenamente: "La infraestructura tiene que avanzar significativamente pero con la ayuda del Gobierno; de otra manera es imposible". Y es que los potenciales clientes de coches eléctricos no consideran esta apuesta de movilidad sostenible por dos razones: una, la autonomía, otra, los tiempos de recarga.

Un estudio mundial confirma que el 42% de los encuestados no compraría un coche eléctrico con las cifras de autonomía actuales, teniendo en cuenta que el promedio de viajes anuales supone solo diez que superan los 400 kilómetros. De otro lado, el 74% de los encuestados considera que el tiempo de carga de la batería es demasiado largo y solo un 52% consideraría comprar un eléctrico si el tiempo de carga fuera, como máximo, de 30 minutos.

¿Cuándo veremos coches totalmente autónomos?

En este punto, los comentarios de los responsables de las marcas en España son algo dispares. Mientras que desde Nissan consideran que "la tecnología del coche autónomo ya ha llegado" y es una realidad a bordo de su modelo estrella, el eléctrico LEAF, desde Lexus, Kia, Toyota, Mercedes y Mazda no lo ven tan claro.

Los responsables de estas cinco marcas coinciden en que la infraestructura necesaria para la conducción autónoma requiere considerar factores relacionados con el entorno, las viales y la conexión con otros vehículos, y "comparada con la infraestructura de carga de coches eléctricos que se encuentra muy poco desarrollada, la otra está casi en pañales".

La conducción autónoma plena está muy lejos. El objetivo es evitar las muertes en carretera pero hay que acostumbrar a los clientes poco a poco a nuevos avances

Los cinco están haciendo progresos -Lexus lanzará un autónomo de nivel 4 a finales de 2020- pero ninguno quiere que se repita el accidente de Uber en Estados Unidos coincidiendo también que "el objetivo de la conducción autónoma es que no haya accidentes ni muertes". Y, a día de hoy, no es posible todavía. La tecnología embarcada en el eléctrico de Nissan es solo "un anticipo pero un cambio muy radical a lo que el cliente está acostumbrado", acelerando y frenando con un solo pedal, por ejemplo.

Las valoraciones coinciden que el paso a un nuevo nivel debe ser paulatino. Hoy, muchos modelos del mercado son semi-autónomos, con asistentes a la conducción que giran solos en las curvas, se mantienen en el carril o aparcan solos. Pero llegar a un nivel máximo es visto, casi, por algunos responsables de grupo como una panacea. Al menos a día de hoy, aunque la tecnología avance a paso de gigante.

En tal sentido, algunos están tomando conciencia de que nunca alcanzarán el nivel 5, a pesar de que Mercedes pondrá en marcha a finales de año un programa piloto de pruebas con prototipos equipados con tecnología de niveles 4 y 5, por lo que es pronto para avanzar conclusiones.

Las nuevas generaciones parecen menos interesadas en el mundo del automóvil. ¿Cuál es el plan de la marca para atraer clientes jóvenes?

No cabe duda de que hoy día el cliente está más que informado a la hora de comprar un coche acudiendo casi estrictamente para conocer precios. Las marcas lo saben e invierten grandes cantidades en tecnología, algunas con realidad virtual para "sentarse" en el coche como en un entorno completamente real, además de realizar presentaciones internas y encuestas para conocer preferencias antes de desarrollar un modelo nuevo.

Los jóvenes, con pocos ingresos, apuestan por los modelos del segmento B, el de los utilitarios, por el diseño y por la tecnología de conectividad, en parte por el mismo gusto y moda que los mayores que se traducen en los SUV y crossovers.

Fabricantes como Mercedes han cambiado la línea de sus modelos dejando atrás diseños más clásicos y elegantes apostando más por la deportividad. Han logrado cambiar la edad en la compra de algunos modelos. El bajo mantenimiento también es uno de los factores clave, así como el seguro y los impuestos, sintiendo que algunos cada vez más toman conciencia de la protección del medio ambiente.

El concepto de propiedad del coche, carsharing, ¿está cambiando? ¿Hacia dónde vamos? ¿Cuál es la posición de la marca?

Todos hemos sentido una mayor libertad cuando, al cumplir los 18 años, pudimos obtener el permiso de circulación. Pensar en tener un coche cuando se está alcanzando esta edad, supone ser más libres. A nivel de España, José María Terol explica que la situación económica que afecta a los jóvenes limita las posibilidades de disponer de un vehículo propio.

Ninguna de las marcas con las que hemos hablado apostará por matar el concepto de propiedad tradicional y hacerlo exclusivamente por la movilidad compartida. Sería un suicidio

En parte, así nace el "carsharing", un fenómeno de movilidad compartida que está tomando más protagonismo, especialmente entre las nuevas generaciones de jóvenes. Además, es una forma de reducir las tasas de emisiones en las ciudades con una menor cantidad de coches, y a lo que se une la búsqueda del ahorro, especialmente en el mantenimiento de los vehículos. Todos los factores suman y las marcas lo aprovechan con nuevas formas de compartir coche.

Aún así, todos coinciden en un punto importante y es que no hará desaparecer el modelo tradicional de propiedad: continuará habiendo clientes que prefieran disponer de su coche particular sin necesidad de saber qué ha podido ocurrir en su vehículo al ser utilizado por otras personas o el uso que se le ha dado, si bien como segunda opción de movilidad y, en ocasiones, especiales, será una solución. Combinado con los eléctricos será la alternativa a las duras restricciones de tráfico en el centro de algunas grandes ciudades.