¿Cómo usar el climatizador automático del coche? Te contamos sus "secretos"
Parece extremadamente sencillo manejar el climatizador automático, y lo es. Pero cuenta con algunas particularidades que quizás no sepas, lo cual nos lleva a pensar que estamos haciendo el uso correcto del sistema. Hoy te explicamos cómo funciona el sistema de climatización, cuál es su uso más eficiente y los secretos que esconde detrás.
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Publicado: 17/05/2020 18:00
Comprar un coche con climatizador automático es un plus frente al que tiene aire acondicionado, especialmente porque regula de forma automática el funcionamiento, adaptando el caudal del aire y la temperatura. Además, las marcas lo consideran un sistema de confort a bordo, pero también lo es de seguridad.
En primer lugar, debes saber que la temperatura del habitáculo por encima de los 25º es un peligro que, algunos expertos, lo comparan con un conductor ebrio. El hecho de conducir con una temperatura tan elevada aumenta el tiempo de respuesta del conductor en un 20%, por lo que se debe mantener una temperatura de entre 18º y 22, como máximo, tratando de ser entre 5 y 8º más cálida en la zona de los pies que en la de la cabeza.
La calefacción debe dirigir su caudal de aire caliente, en primer lugar, a la zona de los pies e ir subiendo progresivamente, y no dirigir las toberas de ventilación directamente al torso y la cabeza. Este es uno de los principales errores en el uso del climatizador automático, como también la falta ventilación y la distribución inadecuada en el habitáculo, que puede interferir en el detector de atención del conductor como un síntoma de fatiga.
Pero quizá desconozcas que la temperatura que aparece en las pantallas de climatizado no es real. En realidad, se trata de un índice condicional de comodidad que los fabricantes tienen en cuenta durante el desarrollo del vehículo. De ahí que esta temperatura varía según marcas. Como ejemplo, los 22º en una marca como Volkswagen expulsan aire fresco, mientras que en Nissan tiende a ser más caluroso.
Automático significa que el sistema puede controlar por sí mismo, por lo que se recomienda señalar una "temperatura" y activar el botón Auto, además de abrir todos los aireadores, cerrar ventanillas y el techo panorámico si dispone él. Así, el propio sistema se encargará de repartir el aire frío por todo el habitáculo de la manera más eficiente posible, hasta alcanzar el índice condicional de comodidad deseado.
Hoy día, los climatizadores automáticos disponen de sensores de radiación solar, que se encargan de medir la temperatura exterior y la incidencia de los rayos solares. Junto con el sensor que mide la temperatura interior, el climatizador automático ajusta la temperatura, pero si tenemos el frío activado apenas se siente.
En sistemas más modernos, los sensores se multiplican. Los hay que miden la calidad del aire, el contenido de dióxido de carbono en la cabina, consideran informaciones del sistema de navegación, etc. El objetivo es el de medir y ofrecer una temperatura diferente, por ejemplo, en las filas segunda y tercera de un vehículo.
Como te hemos contado al principio, el climatizador está considerado un elemento de confort pero también de seguridad. Seguramente te habrás dado cuenta que cuando diriges el aire a la zona de los pies, todavía sigues notando un pequeño flujo de aire frío o caliente por las toberas centrales. Esta es la cuestión de la seguridad, en la que entre un 10 y un 20% del aire se dirige a las salidas de los extremos y al que hay bajo el parabrisas, evitando que los cristales se empañen.