El coche de combustión va a ganar: la clave que le permitirá sobrevivir en 2035
El impulso de la Eurocámara a la prohibición de los coches de combustión en 2035 ha recibido el apoyo de los 27 países de la Unión Europea. Sin embargo, Alemania ha abierto una puerta que, de confirmarse, permitirá en la práctica la supervivencia de este tipo de vehículos.
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Publicado: 29/06/2022 18:30
Como informábamos el pasado 8 de junio, la Eurocámara aprobó llevar hacia adelante la nueva ley que prohibirá la venta de coches nuevos con motor de combustión en Europa a partir de 2035.
Esto, en la práctica, supone la muerte de todos los vehículos térmicos de gasolina, diésel y gas, así como los híbridos e híbridos enchufables, dejando como única alternativa posible el coche eléctrico.
Una vez dado ese paso, llegaba el momento de negociar con los 27 países miembros de la Unión Europea para certificar su implementación práctica. Sin embargo, Alemania primero y otros países después pusieron pegas al respecto.
Finalmente, tras varios días de conversaciones y una negociación final de 16 horas, los 27 han acordado apoyar la prohibición de los motores de combustión en Europa a partir de 2035. Y esto incluye a Alemania.
Los combustibles sintéticos
Sin embargo, se ha abierto una puerta que en la práctica supondría la supervivencia del motor de combustión en Europa más allá de 2035. Una puerta que la Eurocámara había cerrado con varias vueltas de llave, pero que Alemania se ha encargado de abrir de nuevo.
Se trata de la autorización para el uso de motores de combustión con combustibles sintéticos si el balance neto de emisiones de dióxido de carbono equivale a cero. Es decir, si durante la elaboración de dicho carburante se compensa lo que posteriormente emitirá el vehículo al circular con él.
Al respecto, el jefe de política climática de la UE, Frans Timmermans, ha reconocido que la Comisión mantendría una «mente abierta» en referencia a esta petición de Alemania.
La postura de la administración de Olaf Scholz, canciller alemán, va en consonancia con la apuesta de muchos fabricantes germanos, que han apostado muy fuerte y están invirtiendo mucho en el desarrollo de combustibles sintéticos. Hablamos de firmas tan potentes como Bosch, Audi y Porsche, estas dos últimas pertenecientes al Grupo Volkswagen.
Los mencionados e-fuels, son producidos a partir de energías renovables y con la captura de dióxido de carbono de la atmósfera como parte del proceso de elaboración, Posteriormente, durante su uso en vehículos, emite una serie de partículas y gases contaminantes de manera muy similar a la de los combustibles fósiles convencionales.
La ventaja está en conseguir que el balance de emisiones, la diferencia entre lo que se capta de la atmósfera durante la elaboración del e-fuel y lo que se emite durante su uso, sea neutro o incluso negativo.
En cualquier caso, la Unión Europea como organismo tiene aún mucho trabajo por hacer para conseguir que sus intenciones se conviertan, definitivamente, en una ley con plazos y reglamentaciones definitivas y plenamente vigentes.
Fuente: Reuters