Un eléctrico con marchas, la sorprendente idea para el sucesor del Lexus LFA

El Lexus LFA es uno de los deportivos más sofisticados que podemos encontrar actualmente en el mercado, pero el que será su sucesor promete serlo mucho más. Para empezar, será un vehículo totalmente eléctrico y contará con baterías de estado sólido para ofrecer una autonomía de más de 700 kilómetros.

Al menos esa es la intención de Lexus, que avanzó el modelo conceptual en el que el nuevo deportivo japonés estará basado meses a principios de año. Pues bien, en esas mismas fechas se filtró la patente de un cambio manual para coches eléctricos y ahora sabemos que ambos proyectos tienen visos de unirse para dar como resultado el primer eléctrico con cambio de marchas de la historia.

Máxima tecnología y sensaciones

Dicha patente (de la cual puedes leer más al final del artículo) fue registrada por Toyota, matriz de Lexus. Ahora, Koji Sato, presidente de Lexus, confirma las intenciones de la marca con el que será sucesor del LFA, en teoría, en 2030.

«Las especificaciones son, por supuesto, importantes, pero realmente quiero que este automóvil sea un halo, un escaparate para el futuro de la dinámica de conducción de Lexus, para expresar la firma de conducción general de Lexus», afirma el directivo japonés en declaraciones a Top Gear.

«La respuesta del vehículo es una de las ventajas del motor eléctrico, el par repentino es un carácter único con un BEV: el conductor puede esperar una reacción más rápida a su entrada», señala Sato, que a continuación confirma que el cambio manual simulado mediante software está en estudio.

«Es un pasatiempo mío, una locura. Estoy buscando un mejor compromiso, incluso en un EV, quiero otro vínculo entre el coche y el conductor. No se trata solo de eficiencia. Me encantan los coches y quiero algo diferente», reconoce.

Peso y aerodinámica

Pero el nuevo LFA, como podríamos llamarlo, será mucho más que baterías innovadoras y un cambio manual simulado para replicar las sensaciones de los deportivos tradicionales. Al igual que su predecesor, ahondará en la idea de establecer nuevos estándares de sofisticación.

«Observamos la herencia de LFA y usamos fibra de carbono según sea necesario», apunta Sato, que también reconoce que la aerodinámica será uno de los puntos fuertes del nuevo modelo con dos objetivos en mente: eficiencia y eficacia.

De la mano de todo ello irá la búsqueda de una notable reducción del peso, algo en lo que las tecnologías de electrolito de estado sólido deben jugar un papel crucial. «Puede aligerar el peso total de la batería, y esta es una gran oportunidad para lograr nuestra reducción de peso», señala Sato, que no ha querido dar más pistas sobre un proyecto aún a muy largo plazo.

Fotos: Lexus