Qué hacer si te encuentras otro coche ocupando tu plaza de garaje

La ocupación de una plaza de garaje privada por un vehículo ajeno es un problema relativamente común que puede generar conflictos y malestar, o que es utilizado en ocasiones como medida de fuerza ante una disputa entre vecinos.

Cuando te encuentras en esta situación, es crucial actuar con serenidad y seguir una serie de pasos para solucionarlo de forma eficaz y legal.

En España, la ocupación indebida de una plaza de garaje privada por parte de un tercero está regulada por la Ley de Propiedad Horizontal y el Código Penal.

Qué dice la ley

La primera establece que cada propietario tiene derecho al uso exclusivo de su plaza de garaje. Por tanto, la ocupación indebida por parte de otro propietario o inquilino puede considerarse una infracción de los derechos de propiedad.

Además, la ocupación de una plaza de garaje por parte de un tercero sin autorización del legítimo propietario está considerada como un delito tipificado en el Artículo 245.2 del Código Penal, que dice lo siguiente:

«El que ocupare, sin autorización debida, un inmueble, vivienda o edificio ajenos que no constituyan morada, o se mantuviere en ellos contra la voluntad de su titular, será castigado con la pena de multa de tres a seis meses».

Qué tengo que hacer si alguien ocupa mi plaza de garaje

Como ya hemos comprobado, la ley prevé la ocupación ilegítima de una plaza de garaje y tienes mecanismos para reclamar tus derechos. Para ello, debes seguir los siguientes pasos:

1. Localizar al propietario del vehículo: si está cerca, se le puede pedir que retire el vehículo. Si no, se debe dejar una nota visible en el parabrisas indicando que la plaza tiene un propietario legítimo y solicitando que desocupe la plaza lo antes posible. Es importante esperar un tiempo razonable, ya que podría tratarse de un simple error.
2. Notificar al propietario de la plaza (si es alquilada): si la ocupación persiste, y la plaza es alquilada, se debe informar al propietario para que tome las medidas legales pertinentes, ya que es el único legitimado para actuar legalmente.
3. Documentar y denunciar: si la situación no se resuelve, el propietario de la plaza debe documentar la ocupación tomando fotografías del vehículo, su matrícula y la nota de advertencia en el parabrisas. Con esta documentación y la que acredite la propiedad de la plaza, debe acudir a la comisaría de policía más cercana para denunciar los hechos.

Este enfoque escalonado permite tratar de resolver la situación de manera amistosa antes de recurrir a medidas legales.