Coche solar, ¿por qué no se impone al coche eléctrico?
En plena búsqueda de la fórmula ideal para dar relevo al vehículo de combustión nos preguntamos por qué el coche solar no es ya una realidad, pues utiliza la energía más limpia que existe.
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Publicado: 20/10/2021 17:30
Mientras la industria de la automoción y la ciencia trabajan incansablemente buscando el modo de conseguir que el vehículo eléctrico, ya sea de batería o hidrógeno, supere sus limitaciones y se imponga como principal opción de movilidad en el futuro, el autoconsumo en las viviendas gana cada vez más terreno ante la imparable escalada del coste de la energía.
Hablamos concretamente de las instalaciones fotovoltaicas o paneles solares, que cada vez están más presentes en los tejados de las viviendas como recurso para reducir el consumo de energía eléctrica proveniente de la red general.
Un panel fotovoltaico monocristalino de máxima calidad permite una eficiencia máxima de poco más del 20%
Así, ya sea a través del autoconsumo sin o con excedente (es decir, vertiendo la energía producida por los paneles solares y no consumida por el usuario a la red eléctrica), o directamente con baterías de almacenaje, lo cierto es que muchos son los hogares que ya recurren al sol como fuente de energía en uno de los países con más horas anuales de irradiación.
Así pues, ¿cómo es que los coches solares no llegan al mercado? ¿Cuál es el problema?
Los obstáculos que plantea el coche solar
Simplificando, el coche solar no triunfa como opción viable para la movilidad diaria por una razón principal: la eficiencia energética de los paneles solares actuales.
Actualmente, existen tres tipos principales de paneles fotovoltaicos en el mercado: los monocristalinos, los policristalinos y los amorfos. Los dos primeros son los más eficientes y utilizan el silicio como principal componente, aunque el monocristalino permite una captación superior de energía.
El problema es que un panel fotovoltaico monocristalino de máxima calidad permite una eficiencia máxima de poco más del 20%, si bien Toyota afirma que en su experimento con paneles de triple unión en el Prius Solar en colaboración con NEDO y Sharp alcanzaba una eficiencia del 34%.
Sea como fuere, este nivel de eficiencia exige una superficie de paneles solares inviable para un vehículo convencional, que generalmente ofrece una extensión de no más de 6 m2 útiles. Por tanto, conseguir potencia suficiente para mover un vehículo solar de manera habitual y a diario resulta poco menos que imposible.
El coche solar más rápido
Según el Libro Guinness de los récords, la velocidad más rápida alcanzada por un vehículo de energía solar es de 91,332 km/h y fue conseguida por el japonés Kenjiro Shinozuka, quien condujo el Sky Ace TIGA de la Universidad de Ashiya en el aeropuerto de Shimojishima, en Miyakojima, Okinawa, Japón, el 20 de agosto de 2014.
Igualmente, se han establecido récords de autonomía como el recientemente registrado por el LightYear One, que cubrió 710 km durante 9 horas a una velocidad de 85 km/h.
Cuánto cuesta un coche solar
Precisamente el LightYear One es un vehículo solar que se espera comience a producirse en serie. Será en 2022 y Valvet Automotive se encargará de hacerlo en Finlandia una vez que termine el proceso de desarrollo.
El LightYear One ya ha sido reservado por casi 1000 personas a un precio partida de 149.000 euros y contará con un diseño moderno y casi cinco metros cuadrados de superficie receptora de energía solar capaces de generar 1,25 kW de potencia (16 CV) y una velocidad de carga de aproximadamente 12 km por cada hora de exposición solar.
Eso sí, cuenta como ayuda auxiliar con una batería recargable como si de un coche eléctrico convencional se tratase y que puede llegar a ofrecer 400 km de autonomía con una carga completa que realicemos a lo largo de una noche con una toma de 230V.
Los paneles del techo y del capó contarán con células solares que captarán hasta 3,4 kWh de energía, para aumentar la autonomía máxima en 40 kilómetros. El coche solar contará con una batería de 60 kWh, la misma con la que recientemente cubrió un trayecto de más de 700 kilómetros a una velocidad máxima de 85 km/h.
Quién inventó el primer coche solar
El primer modelo de automóvil solar fue en realidad un pequeño vehículo en miniatura creado por el empleado de General Motors, William G. Cobb, y que pretendía mostrar el potencial de dicha tecnología de cara al futuro.
Llamado Sunmobile, fue exhibido en 1955 en la convención de Chicago, Powerama. Estaba compuesto por 12 células fotovoltaicas de selenio y un pequeño motor eléctrico.
En España, el primer automóvil solar operativo fue el Fervelectric Solar, creado a partir del Fervelectric eléctrico para no depender de la red. En 1980, Juan Ferret Carbonell introdujo dicha modificación sobre la base del Rambler de 1902 utilizado al inicio: un techo en el que puso placas solares que cargaban las baterías del automóvil simplemente dejándolo expuesto al sol.
El Fervelectric Solar se construyó veinte años antes que el Despertaferro, un prototipo de vehículo alimentado por energía electrosolar desarrollado en el año 2000 por diez estudiantes de la Universidad Politécnica de Catalunya, y que participó en la carrera SunRace 2000 en Australia, competición de vehículos eléctricos propulsados por energía solar fotovoltaica.
Fotos: LightYear