La conducción autónoma ya es legal en Suiza, pero hay un problema. En España ocurrirá lo mismo
En Mercedes se llama Drive Pilot pero cada marca lo llama de una forma diferente, y todas tienen un denominador común: es un sistema de conducción autónoma avanzada ya disponible en Alemania y otros países. Ahora, también es legal en Suiza pero con un importante matiz que impide su funcionamiento, como ocurrirá en España.

Que la tecnología avanza a pasos de gigante es una realidad como también que las regulaciones legales no lo hacen a la misma velocidad. Los fabricantes han dado un nuevo paso al frente en lo que a conducción autónoma, después de un tiempo aletargados. La realidad es que las marcas han estado apostando durante este tiempo por otro tipo de gadgets, llámese pantallas digitales grandes, para cautivar a los clientes.
Y, ahora, cuando ya se ha extendido por todos los segmentos del mercado, estas necesitan otro aliciente que llame la atención de los clientes: los asistentes de conducción de nivel 2+ se han convertido en un nuevo arma que explotar. Porque estos sistemas ya no son solo ayudas a la conducción, sino que permiten levantar las manos del volante y que sea el vehículo el que conduzca en una circunstancias muy concretas, pero siempre manteniendo la vista en la calzada.

La conducción autónoma avanzada no está permitida en España
En Mercedes, esta función se llama «Drive Pilot» y ya está disponible en un gran número de modelos. Es un opcional que tampoco es barato, por toda la parafernalia técnica que necesita, como los sensores LiDAR, pero estos se están estandarizando y los de la estrella son los únicos en el mundo que cuentan con permiso para ofrecer el nivel 3 de los cinco que existen oficialmente.
Un estándar al que se ha sumado recientemente Stellantis con el «Autodrive», y también BYD con uno de los más avanzados sistemas. Lo cierto es que eso de que el vehículo conduzca y hasta adelante por uno mientras echas un vistazo a las noticias es un equipamiento a considerar; pero, en España, la conducción autónoma aún no está permitida.
La DGT dice «estar estudiando la forma más viable y segura de integrar estos vehículos en las carreteras», incluso proponiendo el año pasado un borrador para un decreto que modificaría el Reglamento General de Circulación y el de Vehículos para permitirlos.
El organismo quiere que «España sea un laboratorio de pruebas de vehículos autónomos en Europa». Tarde, porque no solo ya está disponible en los países de nuestro entorno, sino que cuando pudo no lo hizo. Hace casi una década que negó un permiso a la antigua PSA para realizar pruebas del sistema, debiéndose ir a Portugal.
La conducción autónoma es legal en Suiza pero con un importante matiz
Sin embargo, aunque la conducción autónoma fuese aprobada mañana, los coches equipados con los correspondientes sistemas no funcionarían. Desde el pasado 1 de marzo, la conducción autónoma de nivel 3 es legal en este país, pero mientras que los fabricantes -cada uno- no soliciten la homologación correspondiente, la conducción autónoma estará capada.
La homologación pasa porque todos los sistemas embarcados sean capaces de reconocer todas las particularidades de cada país, en este caso Suiza, como las señales verticales o las marcas viales específicas. Una vez que las autoridades verifiquen su funcionamiento, entonces cada marca recibirá la autorización para que sus modelos equipados con la tecnología puedan activar, por ejemplo, el asistente de atascos.
De hecho, puedes comprarte un Mercedes equipado con la última versión del «Drive Pilot», pero el «geofencing» se encargará de apagar el sistema si lo vienes usando. El posicionamiento y la ubicación determinadas por el sistema de navegación se encarga de reconocer si el coche se encuentra en otro país donde no está operativo el sistema, y eso ocurrirá también en España.
