Acceder a los coches eléctricos hoy es un lujo, un estudio apela a un cambio en el sistema de ayuda para fomentar su compra antes de 2035

Fomentar la compra de coches eléctricos es clave para los gobiernos, mucho antes de que la decisión unilateral de la Unión Europea, prevista para dentro de doce años, sea una realidad. El cese de la combustión térmica que afectará a los coches nuevos en 2035, por ahora en el aire, tiene otro objetivo por detrás en el que pocos han pensado: que los parques móviles se renueven mucho antes optando por esta tecnología. Los que compren modelos de cero emisiones ahora, los renovarán dentro de diez años, doce a lo sumo.

Ese es el verdadero objetivo de esta decisión, pero existen dos grandes problemas en la compra de coches eléctricos: sus precios y las ayudas. Los primeros no hacen nada más que subir, como los de combustión e híbridos enchufables, en todas las categorías del mercado y, por otro lado, las ayudas se tornan escasas en todo el continente europeo. Alemania o Italia son países que baten récord en bonificaciones, y se agotan mucho antes de que acabe un largo año, por lo que ya son varios los que han manifestado que no tienen desde dónde tirar para subvencionar la compra.

Los costes de los eléctricos son menores que los de combustión

Con estas condiciones se hace realmente complicado acceder a un coche eléctrico. Prueba de ello es el DacIa Spring o el nuevo Citroën ë-C3. Los dos modelos superan la barrera de los 20.000 euros, sin ayudas, a precio de utilitario con un tamaño más pequeño, prestaciones y autonomías limitadas, una opción más para desenvolverse por la ciudad cuando lo que se busca es un modelo que permita también realizar grandes viajes en familia.

El Consejo Internacional para un Transporte Limpio (ICCT), una entidad sin ánimo de lucro pero que ha tenido un gran peso en la decisión de imponer los coches eléctricos en Europa a partir de 2035, ha realizado un nuevo estudio abordando estas dos claves esenciales, considerando también los costes operativos totales durante cuatro años. En modelos como el Volkswagen ID.3 y el Golf, el primero ofrece una ventaja de 12.300 euros con ayuda a la compra frente 5.100 euros del segundo que no goza de subvención. La conclusión es clara: hoy, los coches eléctricos son para los ciudadanos con mayores ingresos.

Más ayudas para los coches pequeños que para los grandes

El ICCT ha realizado su estudio en Alemania, donde el 97 por ciento de los encuestados con ingresos netos mensuales entre los 5.000 y 18.000 euros cuentan con al menos un coche, y casi el 50 por ciento nuevo. Con un ingreso máximo de 1.300 euros al mes, el 50 por ciento de los alemanes tienen un coche, el 12 por ciento nuevo. La organización apunta que a la inversión en el sistema de ayudas, hoy de 2.250 euros el eléctrico no cuesta más de 40.000 euros y 3.000 euros si su precio es de entre 40.000 y 65.000 euros, solo beneficia a las rentas más poderosas, precisamente los que no necesitan la ayuda.